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Cecilia Casado

A partir de los 50

“A partir de los 50” Siete años ya…

 

Que se dice pronto, siete años; 1.565 artículos, miles de comentarios recibidos y contestados, más de un millón de visitas de lectores. “Filosofía de vida y reflexiones”, un marchamo que parece rimbombante pero que es de andar por casa; “filosofía en zapatillas”, reflexiones del común de los mortales, sencillez en la palabra y el concepto.

Una mirada –la mirada de todos- a la vida después de haber cumplido los 50, la edad fatídica, el ecuador que no es tal por mucho optimismo que le echemos a la cosa, un tiempo en el que hay menos sueños por delante y más desencanto en la mochila, los años del asentamiento en la zona de confort o del cambio brusco y la reinvención personal. Un tiempo en el que las mujeres dejamos de ser “de hoja caduca” para convertirnos en fuertes árboles de “hoja perenne”, superado el desconcierto de la menopausia, quizás sorteado y gestionado el desnivel de la desigualdad con el hombre, trabajado intensamente el síndrome del “nido vacío”.

Tópicos sociológicos, leyendas urbanas aceptadas con poca reflexión interpuesta; prejuicios que no se van ni con agua caliente, gritos desde el silencio de cierto tipo de infelicidad comúnmente aceptada. Y la resignación de tantas personas a partir de los cincuenta años. O la esperanza de quienes todavía tienen fuerza y ganas para encontrar su propio camino en vez de seguir el que les marcó la sociedad.

Releo al azar algunos post de hace tres, cuatro, cinco años. Los primeros que escribí, los últimos que he publicado y me dejo sentir libremente en la emoción que aflora sin filtro alguno desde lo profundo de mi corazón. Estoy contenta y satisfecha; no sé si cambiaría alguna coma de todo lo escrito, pero sí sé que nadie me ha censurado o dirigido en mis palabras en todos estos años.

Así que, entendiendo que sigo siendo libre para conducir este blog de la manera que más me acomode, voy a introducir alguna pequeña variante.

Si algo ha caracterizado al blog es que los lectores que lo deseen puedan incorporar comentarios al mismo y, sobre todo, que estos han sido contestados uno por uno con especial atención. Esta dinámica tiene muchas ventajas y algunos inconvenientes.

Las ventajas: que todos compartimos sentires, opiniones, puntos de vista que suelen ser –la mayoría- enriquecedores. Los inconvenientes: que esta práctica deja la puerta abierta a algún que otro troll o algunas personas poco equilibradas psicológicamente que utilizan estos foros o lugares virtuales para volcar su insania o desequilibrio sin aportar nada ni empatizar con el autor del blog. Sin olvidar a quienes tienen “tanto” que decir que podrían perfectamente crear su propio blog y contarlo allí en vez de invadir y “conquistar” el espacio ajeno.

Es inevitable, es el riesgo de dejar la puerta abierta e invitar a todos a nuestra “casa virtual”, ya que detrás del anonimato hay hombres y mujeres que se crecen y hablan –escriben- con la boca llena lo que en un cara a cara real no se atreverían a decir ni hartas de vino. No puedo evitar que haya personas que necesiten apostillar y molestar a sus semejantes desde el burladero de un nick, pero sí puedo establecer un límite de respeto en mi propio blog.

Algunos temas que voy a tocar de ahora en adelante serán probablemente susceptibles de polémica o agrado/desagrado. Reflejarán un punto de vista discutible (el mío) y serán reflejo de una manera de vivir la vida (tal y como la vivo en primera persona). Pero en ningún caso van a ser permitidos los ataques personales ni juicios admonitorios metiendo el dedo en el ojo (mi ojo).

Por ese motivo algunos post tendrán bloqueada la opción de “Comentarios”; porque es mi libre elección y porque –a pesar de lo muy interesantes que pueden llegar a ser la mayoría de ellos- no siempre se separa voluntariamente el grano de la paja. Otros post llevarán abierta la opción de los comentarios aunque ya no pueda comprometerme a contestarlos individualmente por el tiempo y dedicación que ello conlleva. La dirección de correo electrónico del blog seguirá activa y atendida en cualquier caso.

El blog “A partir de los 50” ha recargado sus pilas y va a seguir adelante. Libre la opción de acceder a su lectura y siempre agradecida por mi parte que así ocurra.

Por lo demás, este mes pasado me ha sido reconocida por el INSS la JUBILACIÓN. (Anticipada)Palabras mayores en mi vida y en la de cualquiera. De eso hablaremos próximamente. Con calma y con toda la lucidez posible.

Gracias por estar ahí.

LaAlquimista

https://www.facebook.com/laalquimistaapartirdelos50/

Por si alguien desea contactar:

apartirdeloscincuenta@gmail.com

 

Temas

Filosofía de Vida y Reflexiones. Lo que muchos pensamos dicho en voz alta

Sobre el autor

Hay vida después de los 50, doy fe. Incluso hay VIDA con mayúsculas. Aún queda tiempo para desaprender viejas lecciones y aprender otras nuevas; cambiar de piel o reinventarse, dejarse consumir y RENACER. Que cada cual elija su opción. Hablar de los problemas cotidianos sin tabú alguno es la enseña de este blog; con la colaboración de todos seguiremos creciendo.


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