– Teatro Principal. Pase de prensa de Genova, la última de Winterbottom. Un padre y sus dos hijas empiezan una nueva vida en la ciudad italiana tras la muerte en accidente de su madre. Cada uno se enfrenta de distinta manera a la nueva situación y a la nueva ciudad. Aparece Catherine Keener. Me está gustando la película. Y cuando al finalizar esperaba sumarme a la ovación… silencio. Sepulcral. Frialdad absoluta. No ha gustado. Y me embarco en una búsqueda de aliados que me ayuden a defenderla. Y curiosamente a pesar de estar protagonizada por Colin Firth, no les ha gustado a las chicas de La banda de la fila 8. Y de momento, sólo estamos El productor y El Caballero Oscuro para defenderla de acusaciones como la que le lanzó un más que prestigioso, famoso crítico cinematográfico. Según él, Genova es “típico bluff del Festival de San Sebastián”. ¿Alguien más nos ayuda a defenderla?

– Los Vizcondes de Valmont. Ambos dos están en Donosti. El que se hizo acompañar por Glenn Close, Michelle Pfeiffer y Uma Thurman. Y al que hizo la vida imposible Annette Bening. Al que dirigió el malvado Stephen Frears. Y el que se puso a las órdenes del académico Milos Forman. Hace 20 años Las amistades peligrosas con John Malkovich y Valmont con Colin Firth se enfrentaron en las taquillas de todo el mundo. Y hoy se encuentran en San Sebastián.

– ¿Nos hemos repuesto de la visión de la discreta chaqueta del señor Malkovich?

– Sólo hay dos películas de los Coen con las que con la primera vez tuve suficiente. Dos películas que no me ha apetecido volver a ver en el cine o en vídeo: Crueldad intolerable y O, Brother. Y mucho me temo que Burn after reading es la tercera. Y en las tres aparece George Clooney. Combinación peligrosa. Aunque encabecen la clasificación del Premio del Público.

– Más de clasificaciones: en el Premio de la Juventud, Thomas. Notable película, sencilla pero potente. En la Quiniela DV de Sección Oficial a concurso: de momento, Frozen River. Merecidamente. Otra notable película que no llega al sobresaliente por un tercer acto demasiado convencional.

– Programa del Zinemaldi ’08: 1 euro

  Entrada para una sesión: 5,60 euros

 Café y cortado en la cafetería del María Cristina: 8,50 euros (y eso que regalaban la leche)

 La cara que se nos quedó cuando el camarero trajo la cuenta: No tiene precio

Eskerrik asko, kazeta. Espero que la entrevista con Colin te haya quitado el disgusto.