Boni se apagó definitivamente hace un par de días, aunque su apagón comenzó cuando un cáncer de laringe le dejó sin voz y, por lo tanto, sin poder desarrollar su oficio. Compartió la tarea de cantar en Barricada con El Drogas y, en menor medida, con Alfredo, que solo era la voz de un puñado de canciones. La historia reciente del rock patrio no se entiende sin su aportación.
Como fiel seguidor de la banda, recuerdo con pena la salida que tuvo El Drogas de Barricada, que continuaran sin él y el enfrentamiento, en forma de comunicado público, que mantuvieron. En mi opinión, el último disco que sacaron ya sin el mítico bajista y cantante no es de los Barrí, es otra cosa. Por otro lado, recuerdo con alegría cuando hicieron las paces y la foto que compartieron del momento. Por aquel entonces, Boni ya había perdido la voz si no me equivoco.
He tenido la suerte de acudir a muchos conciertos de Barricada y todos dejaron en mi un poso de emoción y disfrute. El primero que me viene a la cabeza siempre es uno que ofrecieron en la plaza de la Trinidad de Donostia, dentro de la Semana Grande que organizaban allí los Piratas. Nos llovió lo que no está escrito (a la lluvia donostiarra no le importa que sea pleno agosto) y llegué a casa tan mojado que tenía desteñida hasta la ropa interior. Qué gran noche, mano a mano con mi amigo Endika.
Para despedir a Boni, he reunido las diez canciones de Barricada cantadas por él que, por un motivo u otro, más me gustan. El orden en el que aparecen es aleatorio. Descanse en paz.
Esperando en un billar:
Lentejuelas:
Rojo:
Noche de rock and roll:
A toda velocidad:
Objetivo a rendir:
Acción directa:
Hombre mate hombre:
Pasión por el ruido (la versión del Mordiscos):
Bajo control (también del Mordiscos):