El debate sigue abierto y cada vez son más las personas que se muestran contrarias al “hack a Shaq” (cometer una falta sobre un jugador sin balón y que no está incidiendo en el desarrollo del juego, normalmente sobre el peor lanzador de tiros libres). En FIBA no hay discusión al respecto, la acción se considera antideportiva y además de mandar al rival a la línea de tiros libres, este sigue manteniendo la posesión. En cambio, en la NBA esto solo ocurre en los 2 últimos minutos del encuentro, castigando de igual manera una falta intencionada, que una motivada por el juego en los primeros 46 minutos. Hecho que convierten el hack a (cualquiera con malos % en tiros libres) en una estrategia cada vez más frecuente.
Aunque el hack no es algo nuevo, se viene usando desde la época de Dennis Rodman y se popularizó como estrategia para parar a Shaquille O`neal. De ahí que se le conozca como “hack a Shaq”.
Lo que llama la atención es que en una liga como la NBA, donde prima el espectáculo, se permita una acción que justamente tiene el efecto contrario, ralentizando el juego y restándole espectáculo. Sin alejarnos demasiado en el tiempo, tenemos un claro ejemplo en el Rockets – Clippers de Semifinales de Conferencia del 2015. El partido duró cerca de 3 horas y solo en la primera mitad, el pívot del equipo angelino, DeAndre Jordan, lanzó 28 tiros libres. Un auténtico bochorno.
De momento la NBA no tomará cartas en el asunto del “Hack a Shaq”, escudándose en que estarían cambiando la norma solo por un par de jugadores. Lo cierto es que las estadísticas les avalan si tenemos en cuenta que el 76% de los hacks que se cometieron la pasada temporada (entre Regular Season y Playoffs), fueron solo sobre 5 jugadores (DeAndre Jordan, Dwight Howard, Andre Drummond, Josh Smith y Joey Dorsey). Muchos piensan que no habría tantos hacks si ciertos jugadores mejoraran sus porcentajes desde la línea de los 4.60, único tiro que nunca cambia y que se mejora entrenando.
De todas formas, la NBA deberá seguir muy de cerca la evolución del hack, ya que lejos de disminuir, está aumentando a pasos agigantados. Solo en el mes de Octubre y Noviembre se han cometido 105 hacks, mientras que en toda la temporada 14/15 se cometieron 164, superando las 100 faltas intencionados el 27 de marzo. Hasta 20 franquicias han utilizado ya esta estrategia, siendo otros tantos jugadores los que ya la han sufrido.
Habrá que ver como actúa la mejor liga del mundo al respecto. Nosotros lo único que queremos, es que EL ESPECTÁCULO NO PARE.
Egoitz Arizmendi
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