Después de 246 partidos y siete meses de competición la Euroliga llega a su fin. Restan dos semifinales apasionantes, una final de consolación que consuela muy poco y una final entre dos equipos grandes, pero tan sólo un nombre será el que perdure en el tiempo.

CSKA Moscú vs. Lokomotiv kuban.

O lo que es lo mismo, el más viejo del lugar contra el novato de la clase.

El CSKA ganó la Euroliga en 2.008, y desde entonces ha disputado todas las Final Four excepto la de 2.011. Se puede decir que en su virtud, se encuentra su defecto. Es un gran equipo, buen competidor y capaz de lo mejor, pero también de lo peor. De ocho Final Four haber ganado sólo una, haber disputado tres finales y hasta en cinco ocasiones haber caído en semifinales, es un bagaje insuficiente a todas luces. Seguro que este año no quiere que esta particular historia suya se repita. Para ello cuenta entre otros con el MVP de la Euroliga, Nando de Colo y con Milos Teodosic, que no sólo han sido incluidos en el quinteto ideal de la Euroliga, además son los dos máximos anotadores de toda la competición.

Enfrente estarán los primerizos del Lokomotiv Kuban. Cuenta con el ingenio del base Malcolm Delaney que ha logrado colarse en el quinteto ideal de la Euroliga. Sus puntos, la dirección del equipo y su ingenio pueden ser armas de destrucción masiva para combatir a un CSKA frágil en el aspecto mental. Otro valor a tener muy en cuenta por parte de los de Krasnodar, es a su entrenador Georgios Bartzokas. El griego ya sabe lo que es ganar la Euroliga. La logró en 2.013; además eliminando al CSKA en la semifinal.

A priori los moscovitas parten como favoritos; por experiencia y porque han quedado primeros de su grupo, pero no deben confiarse y pensar que casi sin jugar están en la final. En la parte de competición en la que nos encontramos, es muy difícil colgar el cartel de favorito. Por mucha capacidad y talento que se tenga, si no lo usas en su totalidad, puede que el resultado no sea el esperado.

Fenerbahce Istanbul vs. Laboral Kutxa Baskonia.

Si se me permite ponerme tan sólo el traje de aficionado al baloncesto, afirmaré que es la semifinal más atractiva de las dos. Tiene muchos ingredientes para que sea un gran partido de baloncesto.

Los turcos han desplegado el baloncesto más dinámico y atractivo de la competición y los de Vitoria han dado un paso hacia adelante en su juego con el que se han hecho dueños por méritos propios, de uno de los cuatro mejores equipos de Europa.

En los banquillos estarán sentados el gran Obradovic que buscará su noveno trofeo continental y por parte del Baskonia, Velimir Perasovic que ha sido el artífice de devolver a Vitoria la ilusión por el baloncesto.

Los de Obradovic tienen a tres de sus jugadores entre los diez mejores de la Euroliga; el poder reboteador del ala pivot checo Jan Vesely que ha sido incluido en el mejor quinteto de la competición, el todoterreno Luigi Datome y al máximo taponeador de la Euroliga Ekpe Udoh. Todo esto aderezado con muchos complementos como son Pero Antic, Bogdanovic o Kostas Sloukas hace del equipo turco un temible contrario y un claro candidato a conquistar la Euroliga.

Pero el Baskonia no se lo pondrá fácil en su quinta participación en la Final Four. Su pieza principal es Ioannis Bourousis, segundo jugador que más valoración ha obtenido y máximo reboteador de la Euroliga. Pero el griego no está solo; cuenta con la dirección de Darius Adams, la improvisación de Mike James, el poder anotador de Bertans y un Adam Hanga que después de varios años en la ACB, esta temporada ha explotado y se ha convertido en una de las sorpresas de la liga convirtiéndose en el tercer reboteador de la competición y cuarto hombre que más balones roba.

En las apuestas los de Obradovic parten como favoritos por su plantel tan amplio y al igual que el CSKA, por haber acabado primeros de su grupo. Pero no se deberán confiar si quieren llegar a la final y por supuesto ganarla. Los de Perasovic han tardado ocho años en volver a la Final Four y seguro que no dejarán escapar una oportunidad como esta para hacer algo grande.

Como reza el título del artículo, sólo puede ganar uno. La Euroliga es una competición muy compleja para ganarla. Puede que hayas hecho una primera fase casi inmaculada, que en el Top 16 terminaras primero y en los Play Off barrieras a tu rival por 3-0; pero si el día y a la hora que juegas la semifinal no estás jugando como indican tus estadísticas, todo lo que has hecho hasta la fecha no vale para nada porque tu rival te pasará por encima y de ti sólo se acordarán tu afición (en el mejor de los casos).

Nosotros nos ocuparemos de estar, tanto el viernes como el domingo, delante del televisor; de tener una refrescante bebida acompañada de una suculenta merienda primero y cena después para disfrutar del baloncesto elevado a la enésima potencia.

Guzmán Villardón.

@blog24segundos.

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