JOHNSON, LEWIS, BOLT, Y AQUEL ARTÍCULO DE CIENCIA FICCIÓN | Al aire libre >

Blogs

Juan Carlos Hernández

Al aire libre

JOHNSON, LEWIS, BOLT, Y AQUEL ARTÍCULO DE CIENCIA FICCIÓN

Quería resistir algún tiempo la tentación de hablar de Usain Bolt, pero llegué ayer de París tras haberle visto de cerca y sucumbo con mucho gusto. Además, como seguro que lo haré más veces, alguna tenía que ser la primera.
 
Hace ya un cuarto de siglo que Carl Lewis dominaba la Tierra. Sus cuatro medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles’1984, sumadas a las tres conseguidas un año antes en el Mundial de Helsinki, eran el centro de atención mundial del Atletismo. Corrían ríos de tinta sobre el atleta bañado en oro que no tenía los récords del mundo. Lewis brillaba tanto por sí solo que, aparentemente, ni los necesitaba ni los buscaba.
 
Tras el primer oro de Lewis en aquellos Juegos del 84 conservé el artículo que reproduzco arriba. Hay que ver cómo se le fue la pinza al periodista; es lo que tenía Carl Lewis, una mezcla de contención y explosión que invitaba a soñar. Digo que se le fue la cabeza en esa frase subrayada de las cuarenta zancadas. No cayó en la cuenta de que esa mejora que se le antojó tan sencilla en el momento de escribir su columna, era un avance imposible.
 
Probablemente, ni ha habido ni habrá una zancada tan elegante como la de Carl Lewis, pero en los tres lustros que deleitó al público se mantuvo fiel a esas 43/44 zancadas. En las eliminatorias del Mundial de Tokio’1991 (antes de batir el récord mundial con 9”86) hizo 42.5, pero hasta ahí llegó. En cualquier caso estoy de acuerdo, si Carl Lewis hubiera conseguido dar 40 zancadas con su técnica y su amplitud, habría desintegrado el récord mundial. Pero eso era ciencia ficción en 1984.
 
Pasaron muchas cosas en los siguientes cuatro años, hoy no toca hablar de ello. En la siguiente Final Olímpica, la de Seúl’1988, quedó grabado a fuego en el recuerdo y en la estadística (que no para el Atletismo) un nombre y una cifra: Ben Johnson y 9”79. Sin entrar en debates, se demostró que aquel nombre y esa cifra tenían mucho de ciencia y mucho de ficción.
 
Los años han corrido, y se han ido arañando centésimas al récord mundial de Carl Lewis: Leroy Burrell (9”85), Donovan Bailey (9”84), Maurice Green (9”79) y Asafa Powell (9”77 y 9”74). Hoy, el universo atlético de la velocidad converge en Bolt.
 
El año pasado, en los Juegos de Pekín’2008, Usain Bolt corrió los 100 metros en 9”69… ¡frenando! (Y no digo nada del 200 y el 4×100). Corrió la Final en 41 zancadas, 40.5 en alguna de las rondas. Aquello que en 1984 era un sueño de ciencia ficción ya casi se ha hecho realidad. El viernes pasado vi correr a Bolt en la misma marca que la ciencia ficción de 1988 con algunas décimas de viento en contra, en una gélida y lluviosa noche parisina. Hoy soy yo quien emula aquel artículo del 6 de agosto de 1984: si algún día vemos a Bolt en forma, con rivalidad, buenas condiciones de temperatura y viento a favor, y se dice a sí mismo: “hoy voy a correr los cien metros completos”, seremos testigos de un récord mundial ANTOLÓGICO. Brindo por las 40 zancadas.
 
Y termino este ladrillo sin soñar con el 200, que ésa es otra.
 
 
 
 
 

Temas

Atletismo

Pinceladas finas al deporte rey

Sobre el autor


julio 2009
MTWTFSS
  12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
2728293031