Paris para viajeros. Un album de fotos
He vuelto a hacerlo. Llevaba demasiado tiempo luchando contra la tentación de volver a Paris y me acordé de Oscar Wilde. “La única manera de librarse de la tentación es caer en ella”. Y no pienso dirigirme ningún reproche por ello…
Si lo comparto es por si a alguien se le despierta el deseo. ¡Me encanta ayudar a despertar deseos…!
Os presento “mi” Paris para viajeros ilusionados. El Paris de los turistas suele estar en las revistas y guías publicadas y hay que pagar por él. Éste es gratis. Que lo disfrutéis.
Luna sobre fondo azul. Soñar al atardecer es gratis en Paris. Puente sin turistas, ni candados, puente silencioso con la Luna apuntando directamente al corazón.
La primavera se esconde en el margen del río, engalanando los ochocientos cincuenta años de la Catedral más hermosa del mundo.
Una famosa libreria que cierra a medianoche, cuando ya nadie se detiene a sacar fotos de su fachada. Es el momento mágico de sentarse en un banco, mirando la fuente “Wallace” y dejar volar la imaginación…
La luz de la mañana huele a croissant de mantequilla y a café de La Martinica. El hotel más lujoso no tiene nada que envidiar al balcón con mesita y dos sillas para respirar la ilusión del nuevo día lleno de sol.
Un espacio fuera del tiempo, justo al cruzar la calle. Otro mundo compartido con éste, incomprendido y denostado. Ayer la Catedral, hoy la Mezquita más grande de esta parte del mapa.
Escondido en el Jardin des Plantes, este zoológico antiguo y valioso como un anacronismo inesperado. Otros seres vivos fuera de su sitio, inmigrantes forzados nacionalizados y con permiso de residencia…en las charcas de La Ménagerie.
