Ha llegado el día de la partida, son las 6.45 y ya no aguanto más en la cama. Me levanto y vuelvo a repasar toda la maleta, que no falte nada y lo importante sufre otro nuevo repaso.
El desayuno hoy es mar rápido de lo normal, tengo el estomago cerrado, un poco de fruta y las cosas de ultima hora centran mi atención hasta que se levanta la familia para despedirme. La próxima vez que nos veamos será en Sagúes, la meta el día 7 estará colocada allí.
Besos abrazos e intercambio de buenos deseos con María, Gorka (que lo dejo con fiebre) y Amaia, que realmente es la que sufre todas las consecuencias de mis locuras.
Iñaki ya esta debajo de mi casa, ayer dejamos metidas las bicis en el coche e Idoia nos acercara hasta el punto donde hemos quedado con los Navarros con los que compartiremos autobús hasta Rosas.
Cuadrar 20 bicis y 20 equipajes en el bus ha sido toda una experiencia tipo Tetris, pero al final todo esta organizado y emprendemos la marcha. Primeros saludos y presentaciones, ahora es difícil acordarse de los nombres, pero con el paso de los días y de los km se van grabando.
Se nos presenta viaje largo, 650 km por el lado francés de los pirineos, esperamos llegar hacia las 6 de la tarde.
Rosas nos recibe con una temperatura totalmente mediterránea, 28 grados. Hemos llegado, estiramos las piernas y desencajamos todas las cosas del interior.
Toca la retirada de la acreditación, mucha gente ya lo esta haciendo y es la primera toma de contacto con el gran pelotón. Hay que montar la bici para la inspección técnica, te sacan una foto con ella para quedar identificado, montura y jinete. Presentamos la documentación pertinente, tarjetas federativas, seguros, pagos de los servicios y recibimos una bolsa de viaje con nuestro dorsal que es donde llevaremos toda equitación necesaria durante toda la prueba.
Las caras de la gente muestran el nerviosismo y todos nos fijamos en las bicis del resto, lo fino que esta el uno y el otro, el moreno de las piernas y brazos, testigo de las horas de entreno que lleva cada uno. Al final el camino nos pondrá a todos en nuestro sitio y encontraremos a los compañeros de viaje pedalada tras pedalada.
Iñaki y yo, igual que otros muchos no hemos acercado a la playa de Rosas para meter en una bolsita un poco de arena, que mezclaremos con la de la Zurriola en Donosti para así completar la unión de los 2 mares.
Primer breefin y cena de pasta ha sido un poco caos. Mucha gente para cenar, más de 250 personas contando la organización, y un solo puesto por donde recoger la comida. Las colas han sido eternas, pero rompamos una lanza a favor de la organización y esperemos que con el rodar todo mejore. En la reunión nos dan las indicaciones más importantes para la etapa de mañana y un poco en general las normas para toda la prueba. Cenamos con gente que a día de hoy no conocemos pero que pasado mañana parecerán que son amigos de hace muchos años. El sufrimiento y el compañerismo en la ruta intensifica las relaciones.
Durante todos estos días nos vamos a forrar a pasta y arroz, los hidratos no pueden faltar.
Nos vamos para el hotel, nosotros hemos decidido coger hoteles en todas las metas en vez de dormir en el Transpyr Camp. Ya dormimos en tiendas de campaña y sacos de dormir durante la Trans Atlas, y ahí nos dimos cuenta de lo importante que es descansar bien para una prueba tan dura y de varios días. Donde hay que estar en las mejores condiciones posibles para lograr el éxito.
Es muy tarde y queremos meternos pronto a la cama, dejar todo listo para mañana y descansar lo máximo posible, que falta nos va a hacer. Esperemos que los nervios y la ansiedad no nos jueguen una mala pasada.
Tenemos que madrugar bastante para poder desayunar a las 6 de la mañana y hacer la digestión antes de que a las 8 nos pongamos a dar pedales. Antes de eso tenemos una revisión del material que estamos obligados a llevar encima durante toda la prueba, mantas térmicas, herramienta, comida energética, silbato, repuestos, linterna, ropa de abrigo, GPS, baterías de recambio, agua, etc., un montón de cosas que hacen que la mochila ya pese un montón antes de subirte encima de la bici.
Son las 0.00 no puedo dilatar mas el meterme a la cama, quería subir las primeras fotos, pero ante mi inexperiencia y lo cansado que estoy, lo dejo para mañana.
Prometo que habrá videos y fotos de la primera etapa.
Buenas Noches a todos.