Hola amigos, aquí estoy de nuevo, porque con este tiempo es imposible estar sin ir a la huerta, y como parece que los puntos van por buen camino, y el tendón funciona de maravilla, he dado una vuelta para ver como estaba la huerta. He recogido unas acelgas para comer en casa, y parece mentira que con el invierno que ha hecho estén tan chulas. Ahora, si les acompaña un poco el tiempo, darán unas buenas hojas y hacia últimos de abril o mayo se estirarán. Este año, probablemente en el menguante de abril, haga el semillero de acelgas. No es muy complicado, hago un par de filas, echo la semilla, tapar y aplastar un poco con la base de la azada. Normalmente suelen ser bastante agradecidas y nacen bien. Luego quito parte de la planta dejando una separación prudente entre ellas (40 o 45 cm). Es lo único que suelo dejar en el invierno en la huerta, ya que, como os dije, me gusta dejarla limpia unos meses para que no haya gusanos, (o que haya menos…). La acelga es una verdura que tiene muchísimas propiedades y nutrientes.