Normalmente, cuando preparo los semilleros, suelo usar tierra de la huerta (alguna zona que la tierra esté muy “gotzua”). Este año, sin embargo, pienso hacerlo con tierra diferente. Os comenté que hace poco estuve cortando las zarzas del vecino. Es un terreno que ha estado lleno de zarzas durante muchos años y normalmente esos terrenos suelen ofrecer una capa de tierra de unos 2, 3 o 4 centímetros muy esponjosa y suelta en el que las raíces de las plantas pequeñas pueden desarrollarse mejor. Hay que tener paciencia para recoger esta tierra ya que están llenas de ramitas y suciedad pero, se consigue, como os digo una tierra muy buena. Como veis en la foto, he preparado un montoncito con el que iré preparando los semilleros.