Después de pasar un par de días repartiendo estiércol por todo el cuadro, hoy he sacado la máquina y he empezado a preparar el terreno donde pondré el tomate. Muchos diréis que es muy pronto para preparar la tierra, que el tomate hasta últimos de abril o primeros de mayo no hay que plantarlos. Pues bien, estoy de acuerdo. Pero ocurre lo siguiente: si lo dejo para más adelante (pongamos, por ejemplo, primeros o mediados de abril) y se pone a llover, a ver quién es que mete la máquina en la tierra para cavar. Creo que es mejor aprovechar ahora que hace buen tiempo para pasarla y dejar que la tierra se oree, con estos días de buen tiempo. Luego, cuando parezca que vaya a llover, taparemos la tierra con unos plásticos y hasta la hora de plantar no levantaremos. No sé si os convencerá, pero ya me ha ocurrido muchas veces lo de empezar a llover y no poder cavar la tierra, de manera que desde hace unos años lo hago de esta forma y no me va mal. Además, este año la planta de tomate que tengo en invernadero viene super rápido y creo que antes de mediados de abril la voy a tener que plantar.