O mejor dicho vaya cantidad de temporales seguidos que llevamos. Esta mañana sobre las 10.00 horas, llovía con mucha fuerza, ha habido momentos que al limpiaparabrisas del coche no le daba tiempo ni a quitar el agua. El mes de febrero es un mes al que siempre le he tenido mucho respeto. Siempre hace de las suyas… cuando no son heladas fuertes son temporales, pero no falla, siempre sorprende. De ahí que no me suela gustar sembrar las habas y guisantes en los meses de octubre o noviembre (si es bonancible el invierno, las plantas se adelantan y luego viene febrero con las sorpresas..). La realidad es que es invierno y es normal que haga mal tiempo… mejor ahora que en la primavera o el verano, pero tanto seguido ya cansa. No deja hacer nada en la huerta. El día 22 de este mes es menguante y me gustaría sembrar la patata, pero me temo que no va a poder ser. Tengo que extender el estiércol y después pasar la máquina para hacer la siembra. Para pasar la máquina hace falta que se seque bien la tierra (por lo menos una semana de buen tiempo, a la patata coger la tierra esponjosa el gusta mucho y merece la pena esperar para hacer los trabajos como es debido) con lo que mucho me temo que se pasará el menguante sin sembrarlas. Han anunciado mal tiempo para largo, con lo que habrá que tener paciencia y esperar a que luzca el sol.