La segunda tanda de ‘cogollos de Tudela’ que planté ya están haciendo el cogollo y están a punto de recoger. Aunque no están demasiado grandes voy a empezar a sacarlos, porque si no todos vienen a la vez y los últimos se terminan estirando. Sobre todo en esta época, si apreta un poco el calor, se estiran muy rápido. Las anteriores generaciones decían que la lechuga se estiraba cuando llegaban los días secos y con muchas horas de luz. De todas formas, dice el pronóstico que vienen días de temperaturas normales para la época, pero hoy por la mañana, tampoco sobraba el jersey en la huerta…