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Iñaki Miguel

Con mi merida voy con mi merida vengo

La paz, los moteros, las bicis y Enzo Ferrari, el de los coches

Domingo, 16 de junio de 2013
Sarzana_Berceto.

Preguntaba el “pequeño saltamontes”, Maestro: ¿donde esta la paz?, y éste le contestaba: detrás de Bidebieta. Pues hoy he encontrado la paz, ambiental quiero decir, hay que especificar. A mil metros de altura solo oyes el viento, pájaros revoloteando, algún reptil pisando la hojarasca, un arroyo de agua que fluye entre piedras, y yo en silencio. Observo, escucho, disfruto… de pronto, una moto, una “japo”, ha sido como un cuchillo afilado que ha cortado todo el momento.

Hoy era domingo, día de juntarse con los amigos, parece que todos han salido a la vez, pelotones multicolores de ciclistas, filas serpenteantes de moteros, unos con las de correr, buscando la horizontalidad en cada curva y los de las “custom”, erguidos, chulos, buscando miradas, todos con una meta mañanera: el Paso de Cisa (1.041 m. de altitud). Por aquí pasó en competición Enzo Ferrari, el de los coches.

Al asunto: Ayer temía yo por la subida de un “pequeño” puerto llamado Aulla, pero un paisano vestido de montañero con gorro tirolés y bermudas de pana, que además portaba un estandarte me ha quitado el miedo, me aconseja hacerlo por carretera, y me corrige la dicción del mismo: “Al lua”, ya no aullaba tanto, y así a sido, sin más, solo un poco de esfuerzo. No hay mejor cosa que preguntar. Este paisano junto a otros habían organizado una mañanera en celebración. No se que acontecimiento importante para ellos.

Pero lo duro comenzaba treinta kilómetros antes, para coronar el mítico puerto de estos alrededores y cruzar el Paso de Cisa, con alforjas. Ahí queda eso, pero no desde Berceto, sino desde la otra vertiente, desde Molinello, han sido algo más de cuatro largas horas, interminables, con un sol plomizo, donde por pueblecito que pasaba paraba a beber, y de vez en cuando cogiendo aire en cualquier sombra, momento de recomponerse y disfrutar del entorno, sobre todo según se va subiendo, ver como cada vez se ve más valle, como se alejan los campanarios de las iglesias, con que satisfacción ves quedarse todo atrás.

Los últimos doscientos metros antes de llegar al Paso han sido por una senda semicerrada por la maleza, arrastrando la bici para arriba, ello para evitar tres kilómetros de carretera, ha sido fuerte el esfuerzo, pero ha merecido la pena, he salido de entre la maleza, parecía el coco, las gentes que disfrutaban del lugar se han quedado perplejas, se les leía la mirada: “y este, ¿de donde sale?, de la nada señores”
Lo normal es subir y bajar por la otra vertiente, carretera más ancha y mejor firme, pero mi camino venía de donde venía.

Después de una refrescante bajada de unos diez kilómetros he llegado a Berceto, dando por finalizada la jornada, eran las cuatro de la tarde, y las posibilidades de encontrar alojamiento cerca eran de cero.
Bonito pueblo, además he coincidido con un mercadillo en su zona peatonal, varias terrazas de bares en tres plazas diferentes daban un aire alegre y bullicioso para esta tarde de domingo.

Buscar alojamiento ha sido una pequeña odisea, la referencia que llevaba no ha servido “cerrado por defunción”, he preguntado a una señora que amablemente me ha acompañado a b&b, sin conseguir ver a la dueña, he vuelto a la zona peatonal, y la señora al verme me ha preguntado por el alojamiento, me ha acompañado a otro b&b, después de esperar un rato he desistido, vuelvo a tener a la señora preguntándome si he tenido suerte, le hago un gesto negativo, y le digo que vuelvo al primero, ella me dice en todo jocoso “hoy duermes en la calle”. Oigo decir a una amiga “¡Porqué no te lo llevas a casa!” (risas entre ellas). Tengo que decir que la señora tiene familia en Madrid y Burgos, sabía bastante español. Yo me alejaba.
Por fin aparece Carla que junto con su marido Marino regentan el “bed & breakfast Gioli” de Berceto: simpáticos, amables, queriendo saber, ya lo dice un cartel en su puerta “entras como visitante, te vas como amigo”.

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Los caminos y mi bicicleta, dos amigos.

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