En la Behobia/SS los éxitos parece que se multiplican. No solo la inscripción de la carrera absoluta es una locura -en las última ediciones menos por el sistema adoptado-, ahora es la Behobia Txiki la que colapsa los ordenadores de la organización. El Fortuna se inventó hace unos años una carrera para los más pequeños que hasta entonces se limitaban a animar a la ama o al aita. Pues bien, en la actualidad agotan los dorsales ¡en 24 horas!. Este año eran 2.500 inscripciones. Pues hubo tal número de accesos que durante horas la web quedó anulada.
La Behobia Txiki se organiza en el miniestadio de Anoeta. La logísitica no es sencilla. En la pista hay nervios, tensión, y las lógicas reacciones de niños. Peor llega, en ocasiones, por las otras reacciones paternas/maternas. Para el 9 de noviembre (sábado) habrá una lógisitica mejorada para que todos salga más fluido.
Queda patente el tirón de la Behobia. Todo lo que gira alrededor de la reina de las populares se convierte en oro. La inscripción ha aumentado en un 20% y no ha sido solución. Todos quieren ser protagonistas del finde de la Behobia.
La organización del club Fortuna sigue además aportando novedades para que la carrera sea más redonda en todos los conceptos, no solo en lo deportivo.
Ahí está la iniciativa de ofrecer servicios turísticos y de ocio. Se busca que la participación atlética se complemente con plan familiar o plan para disfrutar de la ciudad. Ahí está el paquete de pintxos, visita a mercado, comida en sociedad gastronómica, sidrería… Con este plan los acompañantes, encantados. ¿El corredor/es podrá combinar tantos minutos de tenedor y cuchillo con los 20 kilómetros de asfalto? Nuevo reto para los populares cocina vasca + Behobia.
Por cierto, este año quienes corran la prueba y vengan con niños tendrán la posibilidad de utilizar la ludoteca. La oferta de servicios sigue mejorando para que no haya excusas de estar en la linea de salida (10 noviembre).