Si alguien me preguntara como Entrenador Nacional de fútbol qué es el talento, la habilidad, la improvisación, el desmarque, las sociedades en el juego de conjunto, la continuidad en el juego o la finalización en un encuentro de fútbol yo les pondría los cortes de vídeo de dos jugadas extraordinarias. Primero, una de posesión y continuidad en el juego de los Pío Pío en el campo de El Madrigal en Villarreal y en donde en los metros finales el fútbol es caro. Jonathan Viera se saca de su chistera un pase al desmarque de Tana y éste de espuela mete un centro a Boateng , que de una chilena extraordinaria y al límite del juego peligroso por levantar mucho su pie de golpeó marca un gol que ha salido en todos los telediarios del planeta fútbol. El segundo corte sería esa jugada que parte de un balón parado en una falta lateral que lanza Illarra y desvía un defensor al otro costado del campo. Aparece Raúl Navas para hacer un pase al corazón del área que se queda escaso pero que Willian José lo trasforma en puro arte con un control orientado y una sutil vaselina por encima del portero Pacheco que acaba besando las redes babazorras y con un defensa intentando sacar el balón sobre la raya de gol. Estos dos goles en la jornada novena de Liga Santander son para enmarcar o grabarlos en un DVD y ponérselo a los niños de una escuela de fútbol para que entiendan de verdad lo maravilloso que es este deporte, ya que esas imágenes quedarán en sus retinas grabadas con detalles de una plasticidad extraordinaria.
Cambiando de tema, para el mister de La Seca Eusebio Sacristán la figura del medio centro defensivo en estas nueve jornadas de liga recae indiscutiblemente en Asier Illarramendi, ya que de las nueve jornadas disputadas ha jugado en ese puesto específico en ocho ocasiones, es decir, todos los partidos menos el primero en Anoeta ante los merengues del Real Madrid. En aquel partido jugó Markel Bergara en este puesto que está situado en una posición intermedia delante de los dos centrales y detrás de los dos médios puntas por delante en zonas de canalización y organización del juego. Es el futbolista que jugando desde la posición da el equilibrio. Illarra junto a el arquero Rulli y al central zurdo Iñigo Martínez no saben lo que es tocar banquillo ni ser sustituido y es que el de Mutriku está en ese grupo selecto de jugadores que no se han perdido ni un solo minuto en este campeonato regular en las nueve jornadas ya disputadas.
Las parejas de baile en ese triángulo han sido en dos ocasiones, Illarra, Pardo y Zurutuza; en una ocasión Illarra, Oyarzabal y Zurutuza; en otra Illarra, Markel y Zurutuza y en otras cuatro Illarra, Prieto y Zurutuza, teniendo el ’17’ más protagonismo cuando el equipo adversario jugó con un sistema de juego 1-4-4-2 casos del Betis, Alavés, Espanyol, Eibar, ya que siempre jugó sin un marcador definido, muy libre de marca y sacando el balón jugado desde muy lejos de la portería rival. En otros encuentros sufrió más como contra Real Madrid, Villarreal, Eibar y Athletic, ya que las vigilancias y marcas lo neutralizaron y le fue más difícil la circulación del balón. Con todo lo expuesto quiero decir que habrá partidos que Illarra pueda jugar en esa posición y en otros lo podrán hacer tanto Pardo, como Gazta o Markel para que el de Mutriku pueda ugar un peldaño más adelantado según a los rivales que nos enfrentemos. En estos cambios radica la riqueza táctica de los sistemas donde los hacen mucho mejores los futbolistas.