La Real Sociedad de Garitano tenía un reto pendiente, el de ganar por primera vez en Liga Santander a la S. D. Eibar de Mendilibar en la bombonera de Ipurua. Pero los armeros sabedores de que aún no habían sumado un solo punto, salieron desde el pitido inicial con el cuchillo entre los dientes a competir como jabatos.

Así comenzó el derbi con un ritmo y una intensidad muy alta, además de esa presión asfixiante que te hace sufrir y perder muchos balones. La Real no se sintió cómoda sobre el verde (que por cierto estaba muy blandito e irregular) y a causa de esa presión el equipo local embotelló a los locales en su propio campo; no los dejaba salir, no les daban tregua,.. ¿Cuál fue el motivo? Muy fácil. Si cuando eres poseedor del balón lo vuelves a perder con suma facilidad y, además, todas las segundas jugadas y balones divididos son del conjunto rival, con esa dinámica de juego solo puedes defender como gato panza arriba…

Pero amigos lectores, cuando peor estaban las cosas trenzamos una buena combinación con Willian José y Juanmi, que se queda solo ante el meta Dimitrovic, lo regatea, y se ve obligado a derribarlo con los dos brazos en la cintura del jugador boquerón. Penalti y expulsión que solo se quedó en amarilla. La pena máxima la transforma William José que se lesiona en el golpeo y entra Bautista. Se desinfla el Eibar, pero le vuelve a dar la vuelta a la situación con un ritmo e intensidad alta, y con su habitual juego de entradas por bandas y centros. Así, en una jugada por banda derecha la dupla Arbilla más Pere Milla desbordan a Zaldua y Sangalli y marca el empate Marc Cardona. Tablas en el electrónico en el minuto 25 y un conjunto armero enrabietado que sigue con el mismo patrón de juego ante una Real Sociedad, en mi opinión, calamitosa, mediocre, sin fútbol, sin balón y muy escasa de pausa en el juego y talento.

En el segundo acto el partido se calmó, se igualó y fue Juamni el que puso un poco de chispa. En un magistral centro desde la derecha de Sangalli al no llega Bautista, que se tira en plancha y Juanmi solo con la cabeza a bocajarro remata y desvía el cabezazo el portero Dimitrovic. Tras esta oportunidad no pasó nada de nada durante muchos minutos, si mucha pelea pero, poco juego vistoso y combinativo. Tanto es así que el encuentro caminaba pasito a pasito a un empate final ya que Oyarzabal en un eslalon muy largo pecó de chupón y perdió una gran ocasión de poner a su equipo por delante en el marcador.

Ante esta situación, cambia el sistema Garitano metiendo a Zurutuza por Juanmi. Quiere jugar con tres medios en el pasillo central para enfriar el partido, pero hay un momento que ve una luz por los costados y quita a un Illara que se metía entre centrales y defendía muy bien los centros laterales y sale Merquelanz por la izquierda…. Velocidad y llegada, pasando Zuru a doble pareja con Zubeldia.

El míster no sabía que el potrillo de Irun, en una desgraciada jugada, se lesiona en su rodilla buena y debe de abandonar el terreno de juego. Ve entonces posibilidades el Eibar en los minutos finales e insisten los armeros en el juego por afuera con centros al corazón del área. En una jugada muy mal defendida Jordán mete un centro, ya no estaba Illarra, se adelanta Charles a Moreno y nos deja helados con un gol en el minuto 90…

Jolgorio armero y cara de pocos amigos en los realistas, porque en sprint final fue para los de Mendilibar, que vieron como sumaban los tres primeros puntos en esta liga y dejaban a la Real Sociedad otra vez sin vencer el Ipurua. Quince días mágicos para recuperar lesionados y corregir errores con todos los medios que hay en Zubieta, que son muchos. Próxima estación el Barça pero ¿en dónde?, lo veremos.