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Idoia Iturbe

Economía global

China anuncia despedir a 1,8 millones de trabajadores…¿medida real o presión internacional del sector del acero?

@idoiaiturbe

Parece que China y su industria pesada siguen siendo actualidad. Este lunes mismo el periódico South China Morning Post informaba a cerca de las declaraciones del Ministro de empleo y el bienestar chino  Yin Weimin China que afirmaba que “se despedirá a 1,8 Millones de trabajadores del acero y el carbón” en medio de las maniobras del gobierno para frenar el exceso de capacidad industrial.

 

¿Estamos ante una medida real o es simplemente se trata de un anuncio para calmar la presión internacional que están sufriendo el país y el sector?

 

Parece que el titular no es una novedad. Hace unos años, en esa misma publicación china, un artículo advertía del crónico exceso de oferta del sector del acero y de la reducción de la capacidad productiva como medida para lograr el equilibro. Equilibro que supondría pasar por quiebras de empresas de propiedad privada, controles de contaminación más estrictos y rigurosas condiciones de crédito para el sector. Medidas que, como en las declaraciones de este mismo lunes, el gobierno hace ya casi 3 años, parecía estar decidido a tomar.

 

Los puestos de trabajo de miles de operarios chinos del sector del acero corren riesgo.

Sin embargo, y tal como mencionaba en el artículo de la semana pasada sobre el sector del acero en China y su impacto a nivel internacional, dichas medidas serían perjudiciales para el Partido Comunista Chino en el poder. Y la realidad de aquellas declaraciones ha resultado ser bien distinta y acertado lo que analistas independientes predijeron. A menos durante estos últimos años, no parece que hayan sido precisamente las empresas estatales chinas, sino otros países y empresas a nivel internacional quienes despiden y cierran mientras el excedente chino inunda nuestros mercados.

 

Ya por 2014 Pekin anunció que se estaban cerrando empresas, mientras los analistas internacionales alertaban en sus informes de investigación de que la reducción de la capacidad de pequeñas plantas estaba siendo de entorno a las 500.000 toneladas cuando el objetivo era la reducción de 10 millones de toneladas anuales. Y, aunque es cierto que el gobierno estaba haciendo “limpia” de muchas antiguas e improductivas pequeñas y medianas empresa, los gobiernos locales no esperaban reducciones superiores a los 5 millones, es decir, ni la mitad de lo que se anunciaba el Gobierno.

Mientras tanto, las fábricas privadas, medianas y grandes, presentaban multimillonarias ganancias netas combinadas pero su margen de beneficio neto era tan solo del 0,41 %. Y si excluimos las operaciones no esenciales, acumularían incluso pérdidas en las operaciones relacionadas con el acero. Ante lo cual la Asociación del Hierro y el Acero de China dijo: “las difíciles condiciones persistirán debido a la debilidad de la demanda, el exceso de capacidad, la oferta de crédito y del aumento de los costes de protección del medio ambiente.” Bien, creo que la reacción de Europa, América o Corea sería apuntar que esas son las mismas difíciles condiciones en las que compiten las empresas internacionales del sector.

 

¿Y si bien esa era la realidad de las empresas privadas, qué estaba ocurriendo con las grandes empresas de propiedad estatal?

 

El tiempo parece dar la razón a las previsiones de Paul Bartholomew (editor de la publicación industrial Platts) allá por el 2014 “aunque la cuota de mercado y la rentabilidad de los grandes fabricantes de acero de propiedad estatal son susceptibles de mejorar con la eliminación gradual de los jugadores más pequeños, los beneficios de dicha consolidación tardarán años en materializarse, y se limitará a sólo unas pocas empresas.”

 

Por lo tanto, ¿cuáles eran las acciones y medidas que el Gobierno estaba llevando a cabo realmente?

 

Trabajadores chinos en protesta por las calles de Sinchuan.

El caso de la huelga de los trabajadores del Grupo estatal Pangang Xichang de Sichuan es un indicador de lo que realmente supone para el Gobierno unas medidas radicales y de impacto para el sector. Su cierre fue ordenado por Pekín y afectaría a 3.000 empleados, sin embargo, las intensas huelgas como reacción a la decisión de sus dirigentes, las pérdidas de ingresos fiscales y la necesidad de redistribuir a los trabajadores despedidos terminaron en renegociaciones y retrasos.

 

En la partida internacional que se está jugando desde hace años, el gobierno chino movía ficha pero con la estrategia de suprimir la ineficaz capacidad productiva lo suficiente para reducir la contaminación y prevenir el malestar social, sin embargo, permitía a muchas fábricas de acero seguir operando cerca del punto de equilibrio para mantener a las personas empleadas y evitar revueltas sociales.

 

Y, en Marzo de 2016, nos encontramos ante una declaración similar, ¿estamos ante una medida real y sostenible esta vez?

 

El Ministro de empleo y bienestar Yin Weimin informó que 1,8 millones de trabajadores (1,3 millones de los sectores del carbón y 500.000 del acero) Chinos van a perder sus puestos de trabajo, pero no fijó ningún calendario para dichos despidos y confía en una transición suave ya que el Gobierno garantiza mantener estable el empleo en general a pesar de la presión a la baja sobre la economía del país.

 

Lin Boqiang, director del China Centre for Energy Economics Research de la Universidad de Xiamen, declaro que sería muy difícil llevar a cabo tantos despidos teniendo en cuenta que las empresas no tienen recursos suficientes para financiar los despidos y que la financiación del gobierno estaba lejos de ser suficiente por lo que advierte que “…o los trabajadores reciben suficiente compensación o se les proporcionan nuevas oportunidades de empleo o podrían dar lugar a problemas sociales”.

 

Pekín, 29 nov 2015 (EFE).- El presidente chino se comprometió a construir “una sociedad moderadamente próspera” para 2020 y reconoció que sacar de la pobreza a los 70 millones de ciudadanos es “una ardua tarea” .

El presidente Xi Jinping declaró a finales de año que “Las reformas de la oferta, cuyo objetivo es reducir el exceso de capacidad industrial, se espera que sean una política clave para China este año 2016”.

 

La reforma incluye que la capacidad de producción de cinco sectores (entre ellos el carbón, el hierro y el cemento) se reduzca en un 30 por ciento para los próximos 3-5 años, lo cual se estima que supone que 3 millones de trabajadores sean despedidos. Parece que los titulares se repiten 3 años al igual que las declaraciones sobre creación de empleo y reduccion de niveles de pobreza.

 

Pekín acompaña la noticia sobre los ajustes con  el anuncio de 100.000 millones de yuanes (14.000 millones de Euros) que se destinarán para los trabajadores despedidos y niegan que pueda crear una reducción del pago de pensiones. Sin embargo, siete fondos provinciales pagan ya más de lo que recibieron el año pasado. Al parecer el Gobierno tiene definida una importante reforma del sistema nacional de pensiones  y un plan para elevar gradualmente la edad de jubilación2 ante un reducido mercado de trabajo. Sin embargo, al igual que con el plazo para efectuar los despidos  tampoco parece eque haya un marco temporal a cerca de cuando se llevarán a cabo estos planes.

 

Es cierto que en las últimas décadas China ha logrado sacar a unos 400 millones de personas de la pobreza  pero el país vive un momento de desaceleración económica que dicen quiere aprovechar para impulsar un modelo más sostenible centrado en aumentar la demanda interna y no en las exportaciones e inversiones. ¿Será cierto y viable?

 

Si esta vez el gigante asiático realmente hace lo que dice la imagen de “economía de mercado” que intenta vender a occidente podría empezar a creerse y una reducción de la capacidad productiva junto al establecimiento de precios mínimos para materias primas en la industria pesada podría aportar garantías a los fabricantes nacionales y reducir la presión de los fabricantes internacionales del sector del acero. Pero, ¿Podrá un gobierno cuya legitimidad depende de su capacidad para continuar mejorando el bienestar de su gente permitirse llevar a cabo estas medidas sin que resulte en un Sichuan3 a gran escala? hasta ahora parece que no, veremos que pasa…

 

Idoia Iturbe

Puedes seguirme en Twitter @idoiaiturbe

 

 

1 “China acumula montañas de acero… ¿acaso esos Himalayas de metal no nos dejarán ver la luz de la recuperación?”,

2 En la actualidad, la edad de jubilación oficial de China es de: mayoría de los hombres 60; mujeres funcionarias y de empresas estatales 55; resto 50.

El caso de la huelga de los trabajadores del Grupo estal Pangang Xichang de Sichuan mencionada en el artículo.

 

 

 

 

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Experiencias, curiosidades y reflexiones sobre internacionalización, emprendimiento y liderazgo.

Sobre el autor

Nómada impulsora de la internacionalización; innovadora y global al tiempo que cercana y comprometida; emprendedora, fundadora de Globalik Business Group, profesora de Deusto Business School. // A pro-internationalization millennial nomad; global and innovative while personable and committed; entrepreneur, founder of Globalik Business Group and lecturer at Deusto Business School.


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