Todo marcha bien en el tema de la remodelación de Anoeta, se siguen los plazos previstos, así nos lo dicen todas las partes y además hubo unanimidad en el ayuntamiento donostiarra para permitir, con los matices que se establecieron, que siga el curso de convocatoria de concurso público al que se presentará la Real y probablemente nadie más, y así en el verano de 2015 poder empezar las obras. Y en esas estamos cuando hay una situación que se cruza en el camino y fuerza que en el pleno del jueves del ayuntamiento donostiarra se presente por el PNV una moción que les tiene mosqueados y no es de extrañar que lo haga.
Resulta que el Gobierno Vasco decidió otorgar diez millones de euros para las obras, pero con destino a Anoeta Kiroldegia, propietaria de la instalación. El presidente de Anoeta Kiroldegia es el alcalde Juan Karlos Izagirre y es él quien debe firmar el acuerdo con el Gobierno de Gasteiz, cosa que alguien entiende que no está tan claro cuando Bildu del Parlamento Vasco se mostró contrario a esta subvención. Entonces la pregunta que se hacen los concejales donostiarras del PNV es si la firma se hará con la celeridad necesaria para que se puedan cumplir los plazos anunciados de obra o si Izagirre se hará el remolón si es que hubiera recibido esa intrucción en su partido.
La Real o quien gane el concurso público para la remodelación de Anoeta necesitará esos diez millones para completar la financiación de las obras, sin ellos será difícil dar el visto bueno al proyecto, así que en esas estamos. El jueves en el pleno del Ayuntamiento donostiarra sabremos lo que va a hacer el gobierno municipal en el asunto.