Alberto Moyano
Aprovechando que el jurado del Premio Cervantes ha decidido adornarse
otorgándole el galardón al poeta Antonio Gamoneda, aquí queda colgada
una de sus más inquietantes composiciones, ‘El Blues del amo’.
Estremecedor poema, si se me permite la expresión, de su libro Blues
Castellano. Quizás haya algún afortunado que no lo encuentre autobiográfico.
Va a hacer diecinueve años
que trabajo para un amo.
Hace diecinueve años
que me da la comida
Y todavía no he visto
su rostro.
No he visto al amo
en diecinueve años
Pero todos los días
yo me miro a mí mismo
y voy sabiendo poco a poco
cómo es el rostro de mi amo.
Va a hacer diecinueve años
Que salgo de mi casa
y hace frío
Y luego entro en la suya
y me pone una luz
Amarilla encima
de la cabeza
Y todo el día escribo
dieciséis
Y mil y dos y
ya no puedo más
Y luego salgo al aire
y es de noche
Y vuelvo a casa
y no puedo vivir
Cuando vea a mi amo
le preguntaré
Lo que son mil y dieciséis
Y por qué me pone una luz
encima de la cabeza.
Cuando esté un día
delante de mi amo,
Veré su rostro,
miraré en su rostro
Hasta borrarlo de él
y de mí mismo.