Alberto Moyano
La Sexta anunciaba anoche un reportaje sobre Polonia en su programa
‘Planeta finito’, aunque finalmente la cosa se reducía a un par de
visitas relámpago por Varsovia y Cracovia. A la hora de buscar al
personaje que hiciera de guía en ese recorrido, los responsables del
espacio no se rompieron la cabeza y optaron por el polaco más famoso de
España: el ¿modelo? ¿stripper? ¿monologuista? Darek, conocido por
acompañar habitualmente a la Obregón.
El reportaje, que no se saltó ni un solo tópico de cuantos se le
pusieron por delante sin por ello dejar de obviar los aspectos más
oscuros de la historia reciente del país, ofreció ejemplos de manual de
lo que podría definitrse como desubicación espacio-temporal: Darek en
el portal en el que nació Joseph Conrad; Darek, frente a la estatua de
Copérnico; Darek en el museo de Madame Curie; Darek en la casa de
Federico Chopin; Darek en los ‘santos lugares’ en los que oró, trabajó
y vivió Karol Wojtyla. Y siempre con inequívoca expresión en el rostro
de no saber muy bien qué es todo esto.
El musculado polaco aprovechaba el viaje para charlar con varios
compatriotas –todos ellos hispano-parlantes y alguno incluso con
marcado acento gallego– sobre diversos aspectos turísticos de las
visitas. Una anécdota ilustra el grado de surrealismo alcanzado: Darek
se reúne con un amigo de toda la vida en un restaurante y éste le
pregunta qué tal le va en España, como si regresar ahora a su país
rodeado de cámaras de televisión no fuese una respuesta.