ENERO: Luminosa aunque sobrecogedera estampa que muestra al alcalde donostiarra en el momento de recibir una descarga de 220 voltios de energía ciudadana, descalzo y con el suelo mojado.
FREBRERO: Un clásico del gótico flamígero: Letizia Ortiz, capturada por la cámara esta misma mañana en el momento de clausurar una exposición donostiarra.
MARZO: Estremecedora imagen de Ernesto Gasco, en el momento de saltar sobre el vacío desde la Concejalía donostiarra de Movilidad a la Viceconsejería de Transportes del Gobierno Vasco.
ABRIL: Variación de la anterior, con Iñigo Alonso salvando con gracia y donosura el gran desnivel existente entre los autobuses donostiarras y la dirección de Euskalmet.
MAYO: primaveral fotografía a todo color que muestra a Nicolas Sarkozy en el momento de desfacer tres entuertos internacionales, sin dejar por ello de atender al permanente diálogo que mantiene con Carla Bruni.
JUNIO: Audaz fotomontaje de José Ignacio Munilla entrando en la Diócesis donostiarra como Jesús en Jerusalén, es decir, recibido por la multitud y entre palmas.
JULIO: Recreación de Obama emulando a Ozzy Osbourne, en el momento de
degollar a mordiscos sobre el escenario una paloma, en este caso, la de
la paz.
AGOSTO: Espectacular escena que recoge el momento en el que Silvio Berlusconi pulveriza, no una réplica, sino la auténtica catedral de Milán de un golpe de rostro.
SEPTIEMBRE: Bucólica imagen del diputado general de Gipuzkoa, ataviado de aitzkolari y recortando a golpe de hacha el presupuesto foral de Cultura.
OCTUBRE: Conmovedora aunque improbable estampa campestre de Rodríguez Zapatero, corriendo por unos prados rebosantes de brotes verdes.
NOVIEMBRE: Solidaria imagen de Patxi López, fumando bajo la lluvia, en la puerta de Ajuria Enea.
DICIEMBRE: Variopinto collage de los bomberos donostiarras, mostrando sus musculados torsos, con el objetivo de recaudar fondos, no para frivolidades, sino por una causa noble. Sí, en efecto: el alumbrado navideño.