El onanismo sólo empezó a provocar ceguera temporal y fusión de la espina dorsal una vez que el infierno comenzó a remitir como poderosa arma disuasoria. Desde entonces, el extenuante combate por mantener libre de clérigos la pequeña parcela de nuestras vidas se ha ido convirtiendo en una imposible partida de naipes en la que […]