Triste estás más guapa | El jukebox >

Blogs

Alberto Moyano

El jukebox

Triste estás más guapa

Cecil B. Demille decía que las películas deben comenzar con un terremoto e ir creciendo en acción. Le faltó añadir que en la medida de los posible, porque en lo que a esta 60 edición del Zinemaldia el arranque no tiene parangón. El lunes llegaba después de un fin de semana adrenalítico, abigarrado de estrellas y pleno de películas llamadas a estallar en cartelera a lo largo del año. La normalidad democráctica llegó ayer de la mano de dos película francesas, la primera de ellas paradójicamente, española: «El artista y la modelo» y «Foxfire».

Quo Vadis, Fernando? Fernando Trueba lleva algunos años buscando su propia manera de ser otro Garci. Tras la infausta «El baile de la Victoria», el director regresa a la Sección Oficial del Zinemaldia con una película en blanco y negro a la que sólo le falta ser muda para ingresar de lleno en la postmodernidad. El argumento gira en torno a un veterano escultor que encuentra en una joven vagabunda a la musa que le faltaba para acometer una última obra en su vida que, por cierto, acaba siendo tan ramplona como la propia película. Entiéndaseme bien: «El artista y la modelo» ni siquiera es una película malísima, tan sólo un monumento al tedio cinematográfico. Digamos que la cinta es al cine francés lo que «Blancanieves» al cine mudo de los años veinte. En algún momento, Trueba dejó de ser un director gótico flamígero para convertirse en uno románico tardío, siglos XII y XIII. Cuando el vetusto protagonista que interpreta Jean Rochefort asegura que el cuerpo de una mujer es la primera prueba de la existencia de dios uno teme que el «landismo» haya resucitado en formato «arty»; cuando añade que la segunda es el aceite de oliva los temores se centran en que Manuel Vicent irrumpa de un momento a otro en escena.

De la utopía a la majadería. A diferencia de la anterior, la segunda película francesa del día era,efectivamente, francesa. «Foxfire», de Laurent Cantet, es la historia de unas adolescentes que hartas de soportar al grupo de machos alfita de instituto que, por otro lado, protagonizan buena parte del ciclo Very Funny Thing deciden explorar el camino de la respuesta. «Triste estás más guapa», espeta un gañán a una de las jóvenes cuando regresa a su pupitre tras sufrir la pertinente humillación pública en la pizarra del aula. Magníficas cuando se limitan a devolver golpe por golpe mediante estupendas venganzas, las aprendices de activistas desbarran al adentrarse en los procelosos terrenos de la acción «revolucionaria». La película relata el tránsito de la utopía a la majadería, pero también la única época de la vida en la que todos coleccionamos desatinos con una cierta grandeza: la adolescencia. Así como «El artista y la modelo» podría ser francesa, «Foxfire» jamás podría ser española. Sus hechuras políticas resultan impensables en la cinematografía de nuestro país.

Temas


septiembre 2012
MTWTFSS
     12
3456789
10111213141516
17181920212223
24252627282930