9.00-10.00: consumidores que salen del supermercado con siete bolsas de plástico me explican las virtudes de las prácticas ecológicas.
10.00-11.00: Unidades familiares con tres vehículos a motor en el garaje me sueltan una perorata sobre la sostenibilidad.
11.00-12.00: Fanáticos del rumor sin confirmar me imparten la primera clase del día sobre el buen periodismo. No será la última.
12.00-13.00: los mejores sindicalistas de clase me explican pormenorizadamente que aprobaron un ERE en el consejo de administración sin darse cuenta.
13.00-14.00: Postfeministas profesionales de última generación me consultan la posibilidad de acuñar el término ‘nanomachismos’ con el objeto de seguir haciendo caja en un escenario en el que la competencia se ha disparado y cada vez resulta más difícil asomar la cabeza.
14.00-15.00: Altruistas voluntarios de cualquier causa noble se abren paso a codazos en la manifestación para llegar hasta la pancarta y garantizarse un hueco en la foto.
15.00-16.00: Adictos al aire acondicionado me cuentan que se desvelan de madrugada agobiados por el cambio climático.
16.00-17.00: Ateos de pro me adelantan a dónde irán de vacaciones esta Semana Santa.
17.00-18.00: Encarnizados enemigos de la opresora estructura familiar me saludan sin detenerse porque llegan tarde al cumpleaños de la abuela.
18.00-19.00: Devotos lectores de cualquier texto sagrado me desgranan las manipulaciones de los medios de comunicación.
19.00-20.00: Empoderados me anuncian que acaban de iniciar su enésima relación con otro de sus jefes. Les doy la enhorabuena y les pido que no olviden invitarme a la boda.
20.00-21.00: Materialistas dialécticos me venden las virtudes de la homeopatía.
21.00: 22.00: Apóstoles de la paridad me aclaran que en realidad la presencia de mujeres en los órganos decisorios es más que nada un guiño que tampoco tiene tanta importancia.
22.00-23.00: Apóstoles de racionalismo me recuerdan las ventajas de dormir con la almohada apuntando al Tíbet.
23.00-00.00: Cojo el mando a distancia y pulso la opción ‘play a todo’.