Alberto Moyano
“Aquí estoy. Superbien. En el sofá de casa, ubicación que, tal y como ya me había advertido mi señora, en caso de fracasar sería mi destino durante la temporada 2008-09, eso sí, con cláusula de revisión al término de la primera vuelta.
Han sido días inolvidables. No he podido dejar constancia en este mi diario porque alguien de casa -las niñas- me lo había cogido para hacer sus dibujitos y así, pero ya lo he recuperado. En fin, que aquí estoy.
Jo, la junta fue fenomenal. ¡Qué gente! ¡Esos sí que quieren al equipo! Todo gratis: tablao, sillas, power-point, due diligence… Y el público, una gente estupenda. Yo decía: ‘Sí, porque el pasivo circulante es tal’ o ‘el remanente permanece volatil y tal’. Y los accionistas, supermaduros, diciendo que sí con lacabeza, mientras se rascaban pensativos el mentón. Una gozada. Por momentos, me pareció que abusaba de ellos. Bueno, es cierto, por momentos no; todo el rato. Fue una sensación, no sé… He pensado que el año que viene podría convocarla para el 24 de junio, Día del Orgullo Pederasta. Ya digo: qué miradas, qué devoción. Les veías ahí y pensabas: ‘Si es que sólo les falta hablar’.
Luego, perdí la votación sí, es cierto, pero porque quise. Algunos estaban ahí, agazapados, esperando que arrasara para luego decir que si ‘Hitler también ganó las elecciones y no sé qué’. Pues perdí. Que se jodan.Y los periodistas que aman los colores, ahí, dándolo todo. ‘K ha resucitado el equipo’, escriben. Y sí, bueno, algo así, ¿no? La tumba está abierta y el cuerpo se mueve, bien es cierto que por la primera han pasado los saqueadores y el segundo se convulsiona debido a la habitual labor de los carroñeros sobre los cadáveres, pero, bueno, ése es otro tema.
Peor los fácticos. ‘La Real nunca caminará sola’, publicaron al día siguiente del desatre del 15-J- ¿Nunca caminará sola? ¿Eso qué es? ¿El lema de algún centro de rehabilitación para lesiones de médula? Si al menos fuera ‘nunca correrá sola’, aún tendría un pase, pero ¿nunca caminará sola? ¿Caminar? ¿En fútbol? Ahí se ve lo que aman éstos al equipo.
Nunca me han entendido. Jamás me he dedicado a reflotar empresas, tal y como han dicho. Otra mentira. Decir que yo reflote empresas es como decir que el ‘Odissey’ reflota barcos. En absoluto. Simplemente, los merodeamos, por fuera y por dentro, por si contienen algo de provecho que rascar. Nada más. Ni hundimos, ni reflotamos. Eso lo hacen otros. Los demás venimos después.
En fin, que aquí, en el sofá, encantado, no, más aún: feliz. Con una mano haciendo ofertas millonarias por el estadio; con la otra, como un menesteroso ante la puerta de la Diputación, para que les paguen la nómina a esta pandilla de chupópteros y crecepelos. Una imagen contradictoria, pero bellísima, como esos tipos que salen del casino de madrugada, arruinados, con la pajarita suelta y silbando canciones de Sinatra. Bueno, al menos así aparecen en los anuncios navideños de colonias.
Sigo superenchufado y con más ilusión que nunca. Vamos, que no dejo el cargo ni loco. Estoy lleno de proyectos: tantos fichajes que no hacer, tantos directores deportivos que despedir antes de que lleguen, tantas fusiones que cerrar, tantas promesas que romper… que sólo pensarlo es que enloquezco.
En fin, a todos los que aman al club, un fuerte abrazo. A los demás, me temo que nos vemos en los tribunales. Ya se ve cómo quieren algunos los colores, joder”.