La segunda jornada de ambiente vasco protagonizada por el Coro Gaztelupe en Suramérica fue al otro lado del Río de la Plata. El grupo cruzó la enorme desembocadura en un buquebus y alcanzó en dos horas y media y bajo una tormenta la capital argentina: Buenos Aires. Esperaba la centenaria Laurak Bat, donde el coro cantó ya hace nueve años. El presidente, José Mari Landa ‘Josi’, ingeniero civil, ofreció una recepción al grupo, explicando la historia, los 4.000 libros de su biblioteca, acompañado por Arantza Antia, la vicepresidenta; Arantza Goikoa, gerente, la secretaria Paula Lerchundi y el donostiarra de origen Javier Ortega.
Antes de pasar al comedor, el Coro Gaztelupe, de nuevo todos de cocineros, fue saludado por Elvira Cortajarena, delegada del Gobierno Vasco en Argentina. La representante política dijo sentirse «encantada, no me podía perder esta fiesta» con el Coro Gaztelupe. En otro momento, declaró a DV que una de sus ideas es «potenciar las euskaletxeas, abrirlas a todos los vascos. Que sean un motivo de cultura turística, tanto para los vascos que viajen a Argentina y conozcan a los vascos de la diáspora como para los que viven lejos de Euskadi, para que vayan a conocer sus raíces». Aplaudió entusiasmada cada actuación.
Al final de la celebración, regada con vino Goyenechea, de la finca La Vasconia, Jesús Santos entregó otros regalos similares a Arantza Antía, que disfrutó el resto de la noche vestida con la camiseta de la Real Sociedad.
Aquí vemos al Coro Gaztelupe con Elvira Cortajarena, Arantza Antía, con la camiseta de la Real Sociedad, y Arantza Goikoa, posando como un equipo. Junto a ellas está Mikel Plazaola, coordinador de todos los viajes y tenor.
El resto del Coro de Cámara Gaztelupe son, de izquierda a derecha: el ‘dire’ José Javier Etxeberria, Jesús Mari Jauregi, José Ramón Otero (esa cabecita), Juanito Otermin, Jesús Santos, Jesús Irigoien, Xabier Maresma, Isidro Bengoetxea, Mikel Aldanondo, Bittor Alkorta, Joshean Zubeldia, Jean Mari Carricano y Juan Luis Zabaleta. Llevan en la mano un folleto editado por la euskeletxea ‘Laurak Bat’ cuando cumplió los 125 años. Y sigue joven como una neska.