Si hay una década interesante en la historia de la humanidad esos son los años sesenta .Y no solo por que el hombre después de muchos intentos de rusos y americanas llegara a la luna, los sesenta fueron un estallido de color, de formas,que desde la celebre Factory de Andy Warhol rompieron con su irreverencia todo un mundo encorsetado. Dali y Picasso con sus lienzos y sus provocaciones dan un rayo de alegría a un mundo expectante que vivía agazapado por las normas sociales.
Los Beatles, Francoise Hardy,Clif Richard,Lou Reed, Massiel,Los Pekenikes la música esta en todas partes y las ciudades y las playas se llenan de minifaldas y biquinis. Llega la moda hippie,el sexo libre, los intercambios de parejas, las drogas,la belleza de Jane Fonda que marca una tendencia vestida por Paco Rabanne en Barbarella, la ternura y el candor de Jane Birkin,y el erotismo por arrobas de Blow-up de Antonnioni. Todo el mundo es hippie, al menos una vez al año, como dice la pèlicula de Tony leblanc,y todos quieren ser ye-yes como la canción de Concha Velasco.
Es un mundo que renace de sus cenizas, que atraviesa las ciudades en seat 600, que canta Michel Polnaref y al maestro Serge Gaisnbourg con aquello de Je taime moi non plus que aunque por estos lares esta prohibida la gente in se la compra en Francia. Los guateques,las vespas, la mirada entristecida desde los posters de James Dean que presiden un mundo que quiere ser libre.
La falda pantalón,los chalecos de cuero,las camisas abiertas con flores,las cintas en el pelo, las botas hasta las rodillas,Brigitte Bardot que desde Saint Tropez marca la tendencia y pasea sus pies desnudos y sus pechos firmes reafirmando una libertad que nadie puede parar. La década ira tocando el ocaso con la guerra de Vietnan,la desaparición de la escena del gran maestro de maestros Cristobal Balenciaga que acosado por la tendencia del pret a porter cerrara sus casa de alta costura el año 1969,las revueltas americanas,mayo del 68 con nuevas o viejas reivindicaciones sociales .Mientras llegan se estrena Las crueles de Vicente Aranda con la enigmática actriz Capucine que dos décadas después saltara del balcón de su casa poniendo fin a su vida. El triunfo del cine español, Saura, Patino,Picazo,de las películas producidas por Elias Querejeta, del cine de terror a la española con actrices como la malograda Soledad Miranda .Los bares gays,los continuos rumores acerca de la homosexualidad de Luis Mariano que desde París aun sigue cantando la mítica Violetas Imperiales a Carmen Sevilla que se ha quitado la bata de cola y enseña tímidamente un pecho en una película del jovenzuelo Eloy de la Iglesia. Hemos pasado de Bonanza a Escala en Hifi, de El Virginiano a Embrujada,la tv también irrumpe con fuerza en todos los hogares y todos contamos contigo para hacer deporte.
Y de repente llegaron los 70 y nos supieron a poco. Pero ero es otra historia y la contare otro día .Nos quedamos con los recuerdos en blanco y negro,con la música del tocadiscos,con los sábados por la tarde,con la mirada insinuante de Sue Lyon en Lolita de Kubrick,lentamente el color llego a nuestras vidas un color en cinemascope y con los ecos de la guerra fría, los misiles y las revueltas estudiantiles,los hippies se descompusieron como unas rosas en un cuento de Proust,todo dejo de existir .Todo adquirió el aroma de una fotografia vieja,de un recuerdo kitch, de un tiempo muy lejano…en el que como decía Joan Baez la respuesta estaba en el viento.