La reciente muerte del director japones Nagisa Oshima agranda un poco mas la leyenda negra del Festival de cine de San Sebastian que acababa de anunciar, tan solo hace unos días, el ciclo retrospectivo de este año 2013 iba a estar consagrado al director de El imperio de los sentidos. Esta leyenda viene desde muy lejos de los tiempos en que la actriz mexicana Pina Pellicer protagonista de la pelicula de Marlon Brando, El rostro impenetrable se suicidara tiempo después de su aparición en el festival del año 1961.Después llegaria la muerta tras presidir el jurado en el año 1969 de Josef von Sternberg. Este echo llevo a Billy Wilder a escribir en sus memorias: que la mejor forma de saber cuando uno iba a morir es que le invitasen a presidir el jurado de San Sebastian. La muerte de Bette Davis días después de recibir el premio Donostia, prácticamente salio muerta de nuestra ciudad y falleció dos días después en un hospital en Paris, Klaus Kinski, Anthony Perkins,Francisco Rabal también premio Donostia, podría añadirse a la lista el director italiano Mario Monicelli en 2008 a quien el certamen rendía tributo abandono San Sebastian nada mas llegar aquejado de un catarro y murió poco después dejando huérfano a la comedia italiana.
Son solo unos ejemplos, hay muchos mas .Esa fue una de las razones que se descendiera la edad a los premios Donostia ,el riesgo que tras recibirlos fuera a encontrase con el creador, asusto a la organización. Susan Sarandon, Matt Dillon, Richard Gere o el reciente a Ewan McGregor son el resultado de esa renovación, claro que esto tampoco quiere decir nada, en Hollywood el incide de suicidios es muy alto, sobre todo entre los actores jóvenes, pero bueno, eso por el momento no preocupa al la dirección del certamen, que encaja con deportividad la muerte del realizador japones.
De entre las muertes que mas me afecto esta la de la bellísima actriz Capucine que nos visito en la edición de 1969 para el estreno de Las Crueles, de Vicente Aranda. Esta magnifica mujer se arrojo del octavo piso de su casa en Suiza, en 1980.Vivía sola con tres gatos y la vida le pareció imposible de asumir. Su belleza quedo esparcida en el asfalto de Laussana. Quiero pensar que no haber ganado la Concha de plata a la mejor actriz de aquel 1969 que fue a parar a una abigarrada actriz rusa y a la pizpireta Stefania Sandrelli ,no fuera el detonante de su decadencia. Por que eso si que no se lo perdonaría. De todas las modelos que han hecho carrera en el mundo del cine Capucine sera siempre mi preferida,su belleza triste y lejana,la elegante sencillez de su rostro, y una muy estimable carrera cinematográfica,la han hecho pasar al olimpo de mis dioses y no la pienso apear de el por una Concha de plata.