En este restaurante se ha introducido una fórmula distinta: creando una zona específica para degustar platos en una barra, donde el detalle que llama la atención son unas esculturas que vuelan en la parte alta, lo que le da un punto muy personal a esta zona.
En el comedor, se mezcla un poco la parte dedicada a almacenamiento de la vajilla, cara al público, de forma decorativa.
La gastronomia del local combina la clásica con toques de vanguardia, y se traslada a la ambientación del local, clásico con toques inesperados y originales.
Fotos vía: diariodesing