Separar el papel del plástico, del vidrio y de los residuos orgánicos se ha vuelto una práctica común en los últimos años y eso significa que a veces acabamos con un montón de cubos y de bolsas ocupando bastante espacio en cocinas y terrazas.
Para que nuestra conciencia ecológica no esté reñida con mantener nuestra casa ordenada y libre de trastos y olores, hoy os traemos sugerencias que pueden contribuir a que organicéis mejor vuestros cubos de reciclaje.
Cubos y contenedores independientes con diseños originales
Los cubos y contenedores de basura compartimentados son una solución barata y económica para guardar los residuos que producimos en el hogar y que reciclaremos después.
Aunque la mayoría de las tiendas muestran unos modelos que podríamos definir como “bastante básicos”, lo cierto es que hay multitud de tamaños formas y diseños que hacen más fácil encontrar el adecuado para integrar en la decoración que mejor se adapte a nuestra cocina.
Incluso puedes encontrar soluciones modulares que te permiten añadir más o menos módulos en función de tus necesidades o del espacio disponible.
Cubos integrados en el mobiliario
Si prefieres que los cubos no anden sueltos, sino sujetos a paredes, o como parte del mobiliario, también tienes disponibles diferentes opciones. Existen muebles que podrían pasar por un armario o un zapatero pero que, al abrirse, contienen diferentes cubetas para cada tipo de residuo.