El pasado 1 de agosto se celebró el día Mundial de la Lactancia Materna, que arranca la Semana Mundial de la Lactancia materna.
Como madre lactante y Asesora de Lactancia no quería dejar de unirme a esta causa que defiende, de manera contrastada, que la mejor opción, sin duda alguna, es y será que los niños sean alimentados con leche de su mamá. Ahora bien, en temas de lactancia existe muy poca información; y a veces la que hay es además errónea y seguimos aferrados a ella porque lo dice mi madre, mi abuela, o la vecina del quinto. Eso sin sumar el baile hormonal que vive una mujer recién parida.
La lactancia, como casi todo, es un proceso; y además muy diferente entre cada mamá y cada bebé. Así que yo sólo puedo recomendar a toda madre que se encuentra con su hijo por primera vez que se informe, que investigue y, siempre que lo desee, que se rodee de gente que pueda ayudarle a hacer aquello que considere que sea lo mejor para ella y para su bebé, sea lo que tenga que ser. Decidido desde la conexión con su hijo y nada más.
La OMS recomienda 2 años de lactancia materna: 6 meses de manera exclusiva y hasta los dos años como complemento. Después de los 2 años, su recomendación es que se siga amamantando hasta que la madre y el hijo quieran. (A qué sorprende? Ojalá poco a poco la sociedad vaya aceptando que 2 años es la recomendación de la Organización Mundial de la Salud, nada más y nada menos).
Cada vez son más y más los estudios (este que linko muy reciente), que demuestran los beneficios de la leche materna en el niño, en la madre, en la familia y por consiguiente, en la sociedad.
Y cierto es que cada vez más y más gente quiere amamantar; sin embargo la vuelta al trabajo o el comienzo con la alimentación complementaria son en España un motivo de destete habitual.
Aunque no paramos de hablar de beneficios de la leche materna, y aunque entiendo también múltiples decisiones y mitos que llevan a las madres a dar biberón, soy partidaria de empezar a hablar de los riesgos de la leche de fórmula ya que los beneficios de la leche materna son, sin duda, innatos en ella, naturales y por defecto, inscritos en nuestro ADN, ese que nos ha mantenido por los siglos de los siglos.
Así que, aunque podría estar horas y horas escribiendo sobre lactancia, aquí aporto mi granito de arena a esta Semana tan especial y cuyo lema es ¡Apoyo a las madres! Cercano, continuo y oportuno.
En estas letras brindo mi apoyo a todas las madres del mundo; y sobre todo a esas que quieren seguir amamantando a sus hijos y cuya sociedad no se lo pone nada fácil. A esas en especial les diría que escuchen su instinto y hagan aquello que les dicta su corazón.
¿Por qué sigo amamantando 2 años y una semana después? 10 razones por las que sigo amamantando:
Como he dicho que eran 10 motivos me plantaré aquí, aunque tendría miles de motivos por los que decir que sigo amamantando.
Y aunque para mí ha sido un camino bastante sencillo (con mínimos problemas al principio), la lactancia puede ser una prueba de montañismo puro. Eso sí, si te rodeas de gente que sepa y pueda ayudarte, seguro que consigues llegar donde tengas que llegar.
Y aunque soy partidaria del pecho, también diré que es mucho mejor un biberón bien dado que una teta mal dada.
Así que benditas tetas y Feliz Semana de la Lactancia Materna!