Por principio, no suelo prestar atención a los grupos que cantan en inglés cuando no es ese su idioma habitual. Es más, me desintereso de ellos automáticamente en cuanto veo que la procedencia y el idioma no casan. Una de las cosas buenas del rock y el pop español de finales de los 70 y principios de los 80 es que se acabaron los complejos respecto a lo anglosajón, y se cantaba en castellano, euskera, catalán o gallego con toda naturalidad. Es más, eso es lo que daba un toque de distinción a grupos que muchas veces imitaban en lo musical a bandas anglosajonas, pero dejaban de ser miméticos precisamente por las letras o por las formas de cantar en su propio idioma.
Todo se fastidió, o ahí recuerdo yo la frontera, con Australian Blonde y su ‘Chup chup’ y otros éxitos de un ‘indie’ que empezaba a tener conciencia como tal y marcó los años 90. Y todo el mundo se empeñó en cantar en inglés. Con resultados a menudo ridículos: acento de piel de toro, letras simplonas de quien no había aprobado el ‘First’, y un quiero-y-no-puedo-ser-el-grupo-inglés-que-me-gusta, todo bastante estomagante.
Así que cuando Los Nikis publicaron su canción ‘Canto en inglés’ en 1998, con otra más de sus fabulosas letras, firmaron un manifiesto necesario. Con su coña habitual, decía, entre otras cosas, así:
Canto en inglés / canto en inglés
No entiendo lo que canto porque está en inglés
Escribo canciones / escribo en inglés
No entiendo lo que escribo porque está en inglés
Pienso grabar discos en un sello raro con nombre en inglés
Para ser paleto canta en castellano
Yo no lo pienso hacer
Canto en inglés
He nacido en Burgos y canto en inglés
Y hasta ahí el cachondeo niki. Bien es verdad que nunca he rechazado a Björk o St. Thomas u otros artistas nórdicos por cantar en inglés, quizás porque normalmente en esos países el inglés es tan normal como el idioma patrio. O vaya usted a saber por qué.
Los dogmas están para cumplirlos a rajatabla. Sabiendo que un día tendrás que envainártela. Y ha ocurrido.
Todo esto viene a cuento de los donostiarras Thee Brandy Hips, supongo que para tratar de justificar que hasta ahora no les haya prestado la debida atención. Seguramente oí algo de ellos cantado en inglés y algún automatismo los dejó aparcados en el cajón de los grupos imitativos del indie anglosajón. Algo especialmente imperdonable teniendo en cuenta que conozco al menos a uno de sus componentes y es gente muy de fiar, en lo musical y en lo demás.
El caso es que hace poco vi dos de sus vídeoclips, y me pareció estupendo todo: los videos por divertidos y porque mostraban versatilidad en un grupo que lo mismo toca en plan unplugged de campamento que en potente formación eléctrica; las canciones, porque tienen gracia, convicción, talento, vitalidad y autenticidad, aunque te recuerden a otros grupos anglosajones; y el inglés, ay el inglés, resulta que suena completamente natural, sobre todo porque el cantante sabe manejar la voz y las cadencias y no hace todas las frases iguales (me refiero a la melodía), como suele ser habitual en muchos artistas de por aquí, algunos muy consagrados. Ni siquiera sé si entiendo muy bien lo que dice, pero pocas veces se escucha por aquí pop indie tan bien cantado.
A los pocos días vi en ETB3 un reportaje sobre Thee Brandy Hips (que seguro que ya habían puesto muchas veces antes) que me convirtió ya totalmente a los Brandy. Un reportaje muy original, que constaba de dos partes: en la primera, que roza la genialidad, los Brandy explican cómo hacen ‘macarrones a lo adolescente’: “Depende mucho de la hora a la que los hagas. Nosotros nos manejamos en un rago horario que va de las cuatro a las siete de la mañana, depende de cómo haya ido la noche. Si la noche ha ido muy bien, no hay macarrones, por lo evidente”, dicen. En la segunda, tocan una canción en una motora, demostrando su capacidad para adoptar sus canciones a cualquier lugar y circunstancia.
Es un poco patético venir a estas alturas a mostrar devoción por Thee Brandy Hips y unos vídeos que están colgados hace un año, unas canciones que se pueden descargar gratis desde hace meses e incluso se publicaron en vinilo, y que han sonado en multiples conciertos a los que podía haber ido. Sirva esto de acto de contrición.
Thee Brandy Hips son de Donostia y cantan en inglés, pero merecen la pena. Of course.
orain: 45 thee brandy hips from debolex films on Vimeo.
Thee Brandy Hips / Mr. Thinman from Angel Aldarondo // Kosmikar on Vimeo.