Es un disco pequeño, manejable, de bolsillo. El tamaño del CD es normal, no se crean, pero como concepto, lo nuevo de los donostiarras-plurinacionales Elkano Browning Cream es como un pequeño desvío para ir a visitar esos pueblos tan bonitos que hay ahí a la derecha.
De bolsillo es también el instrumento que preside estos ocho temas. Bueno, de bolsillo de gran gabán. Puede confundirse con el acordeón, pero el sonido de la melódica es más dulce, más melancólico, más cariñoso. Con la melódica, ese teclado que se sopla, ha construido Mikel Azpiroz las ocho piezas de Bohemia.
La melódica es identificable con el maestro del reggae de ese instrumento, Augustus Pablo. Pero desde otro punto de vista, nos dimos cuenta de su enorme potencial melódico y melancólico con algunos de los primeros temas de New Order (Your Silent Face o Love Vigilantes) o Eyeless In Gaza (sublime en la introducción de Still Air).
El caso es que con la melódica, Elkano Browning Cream se da a la bohemia, facción gitanos centroeuropeos. Llevando a su personal entendimiento esos aires festivos y tristes, celebratorios y melancólicos, de tradición secular cruzada con el swing y el jazz, y con Django Reinhardt en algún altar, surgen la cimbreante Piña colada (rescatada del primer Lp y reconstruida para la ocasión), la muy bonita y bien descrita en el título Valse meláncolique, ese Akelarre de métrica muy vasca (un zortziko en el fondo, ¿no?), la encantadora Celebration Ska, o la algo misteriosa Bohemia.
Ahora estarán terminando una gira variada o peculiar. ¿O es normal dar tres conciertos en la India después de uno en Sevilla y antes de otro en Menorca? Pues eso.
Además de esa preciosa portada desplegable en el CD, Elkano Browning Cream da la oportunidad de escuchar este jugoso y refrescante disco de menos de media hora en su web. Aquí mismo.
Foto: Jon Cazenave
Portada: Nate Williams