La música africana nunca ha sido mi fuerte, es más, apenas recuerdo cosas que me hayan gustado de verdad, no puede uno con esos ritmillos saltarines y esas punteíllos de guitarra agudos e infatigables. Y sin embargo, ver la película Rebelde (War Witch), estrenada ayer en el Príncipe, ha supuesto todo un descubrimiento musical.
La película, que ganó el premio a la mejor actriz en Berlín para esa niña de 14 años, fue nominada al Oscar a la mejor película de habla no inglesa por Canadá, y ha recolectado montones de premios, es un retrato de una niña de la guerra, obligada a tomar las armas y actuar salvajemente, pero va más allá del convencional retrato concienciador y emotivo. Casi documental, pero lírica y estéticamente muy elaborada al mismo tiempo, más que una proclama por los derechos humanos, es una historia vital en la que la muerte y el amor se contraponen de forma radical, sensible, pero no sensiblera.
Y uno de los métodos no evidentes para crear el clima de la historia de Rebelde (War Witch) es la música, de tinte claramente africano, pero con retazos de soul y de folk occidental y, sobre todo, de íntimo lamento universal. Suenan varias canciones hermosas a lo largo del film, pero uno se queda especialmente conmovido en los títulos de crédito finales, con esta canción:
Tanga – ‘Eme N’gongo Iami‘
En esos títulos de crédito finales que casi nadie se suele quedar a ver, se puede descubrir que todas las canciones que suenan en la película están extraídas del mismo disco, un recopilatorio de música angoleña de los años 60 y 70, que se titula Soul of Angola, antologie de la musique angolaise 1965-1975. Un disco que, según me contaba el otro día el director Kim Nguyen en una entrevista que publiqué en El Diario Vasco, es su favorito de la música africana, y que enseguida supo que quería utilizar como banda sonora de esta película. He aquí otras dos de las mejores canciones seleccionadas para la película, de las 40 que contiene el disco, y en las que habrá que indagar a fondo, dado el nivelazo.
Paulo 9: ‘Fazer Bem’
Arthur Nunes : ‘Tia‘