No cabe duda que, como sucede con todo producto, el automóvil está sujeto a la influencia de las modas y costumbres. Ahora están de moda los SUV, que significa Sport Utility Vehicle, es decir un coche alto, cómodo y con aspecto fuerte. Los hay con mayor calidad y hay auténticos bodrios, que ahora denominamos low-cost o coches baratos. Fíjate bien cuando vayas a comprar un coche. Cualquiera. Sea un SUV, un monovolumen (que ahora han pasado a un plano secundario después de haber estado en la cima del éxito…) o una berlina (las que menos se venden actualmente).
Lo cierto es que conviene tener en cuenta el dinero que estamos dispuestos a gastarnos en un coche y, en función de eso, optar por un modelo acorde al presupuesto. Las gangas no existen. Y si lo parece… mal asunto.
Ayer estuve en Barcelona probando el nuevo Citroën C3, un coche con estilo, agradable y divertido y con precio adecuado. Se empezarán a entregar en febrero o marzo y lo hemos conducido por doquier y es un coche molón. A ellas les encantará y a ellos también porque es manejable y práctico. Además, tiene una cámara de fotos incorporada debajo del retrovisor interior y pulsando con el dedo (muy fácilmente) puedes hacer fotos artísticas o de un piñazo, si lo necesitas. Se llama ConnectedCAM CitroënTM e incluso dispone de un sistema, esta cámara, que detecta una frenada brusca (en caso de incidente) y te graba lo ocurrido 30 segundos antes y 30 segundos después de la frenada. Una pasada… ¿eh?