¿Alemania qué, otra vez a semifinales? No voy a recordar la frase de Lineker, porque muchos amigos germanos se ponen de los nervios con ella porque tienen muy marcado que han perdido una final más de Mundial de las que han ganado. En Maracaná se puedo ver que, más allá de la calidad de los equipos que tenga, el bloque de Low es capaz de hacer lo que los anteriores que vistieron esa camiseta: ganar jugando bien, jugando mal o jugando regular. Es algo que se consigue cuando siempre tienes la misma mentalidad ganadora. Tienen grandeza, son fiables y no se aferran a las excusas. Es la cuarta semifinal consecutiva (2002, 2006, 2010, 2014) y en todos ellos estaba Klose, una de mis debilidades. No es el mejor en nada, pero siempre compite al mejor nivel. Ha superado a todo tipo de mitos en partidos jugados, y siempre ha alcanzado las semifinales.
Gracias a sus goles, Alemania es el primer país que consigue cuatro presencias seguidas a las puertas de la gran final, que el ’11’ merece jugar tras 12 años. De los 18 Mundiales jugados, en 13 acabó entre las cuatro primeras y sólo una vez fue 4ª (1958). Suma tres títulos (1954, 1974, 1990) y desde 1966 su peor clasificación es ¡cuartos! Quizá por eso celebran un triunfo ante Francia en cuartos de manera moderada, porque para ellos es algo normal. El equipo de Deschamps pareció quedarse sin ideas al verse por detrás del marcador. Liderada por Griezmann, el grupo tiene recorrido ya que parce estar en formación para ganarse la vitola de favorita en la próxima Euro que será anfitriona.
Alemania, tras unos partidos abiertos, pareció más centrada, adulta tirando de oficio y mostrando equilibrio. Deja un regusto amargo, ya que apenas mostraron su talento. Tras ofrecer los mejores ratos del mejor fútbol del Mundial, pareció renunciar a ello. Eso sí, sin estar brillantes fue efectiva, entendiendo los tiempos del partido y ayudada por un Neuer soberbio que evitó que Schurrle se convirtiese en Maracaná en un villano tras dos asistencias magnificas de Müller, el mejor del campo junto a Kross. Falló dos goles que Klose hubiese convertido en voltereta y en récord. El portero puso unas manos que recordaron a los guardianes del balonmano y esta vez sólo tuvo que hacer un par de salidas como central expeditivo.
El próximo martes día 8 Alemania estará en la semifinal y en una cita así, esta versión tan sólida y que seguro que asusta más. Muchos creen que este Mundial es el ideal para esta brillante generación alemana, con una base de futbolistas con 26 ó 27 años que tienen tablas y están ayudados por veteranos experimentados y jóvenes ilusionados que disfrutan haciendo grupo.
PD: Quizá este es el momento de recordar que España, para ser campeona del Mundo y de Europa tuvo que superar a Alemania. Y lo hizo de manera clara. Que lo conseguido no caiga en el olvido…