Ya estamos de vuelta…Después de unos días de descanso espero seguir dándole vida a este blog con vuestra ayuda. El que escribe ya ha cargado las pilas. Se presenta un final de verano apasionante con campeonatos de lujo tanto en Las Landas como aquí, con el de Zarautz y Mundaka. ¿Qué tal vuestras vacaciones? En mi caso uno echa las sensaciones que transmite el Cantábrico. Me explico. Bañarse en el Mediterráneo es lo más parecido a hacerlo en una piscina. Uno de pone a nadar como un poseso por matar el gusanillo y cuando se gira hacia la orilla el agua no pasa de la cintura. Horrible. Por más que uno busca pequeñas espumas en las que quitarse el mono…nada de nada. Así que la solución es ponerse el disfraz de ingeniero y levantar castillos de arena para aumentar si cabe la producción de moles en la misma orilla. Ha sido volver al Cantábrico y recuperar ese cosquilleo al entrar al agua. Mucho más si uno estrena tabla, en este caso tablón. He decidido engordar mi quiver y la opción no ha podido ser más acertada. Sensaciones diferentes a la tabla corta y disfrute por doquier. La corta la aparcaremos para otros ratos.

P.D. Os dejo la imagen del cartel oficial de la prueba WCT de Mundaka. El surfista en cuestión es Parkinson.