No voy a desvelar las múltiples virtudes que tiene Aritz Aranburu. Está camino de algo histórico. Sí me gustaría destacar lo que rodea su figura. Pocos surfistas cuentan con semejante apoyo popular. Sus campeonatos en Lacanau y Hossegor han servido para que los mandamases de la ASP asistan a algo que a una organización privada como ella le viene como anillo al dedo. Seguidores es igual a audiencia e igual a marcas interesadas en patrocinar. La ecuación es sencilla. La ASP se ha visto bombardeada por mensajes vía e-mail apoyando a Aritz. En la arena otro tanto. Aritz sale del agua y se ve rodeado por decenas de chavales. En cambio otros salen del agua y como si nada. No quiero decir que el camino de Aritz sea pan comido. Ni mucho menos pero tiene algo que otros nunca conseguirán: carisma.

Os animo a que escribáis cualquier tipo de duda que os rodee la cabeza acerca de Aritz. También mensajes de apoyo. Lo que queráis. Se los haré llegar con mucho gusto.  

Otra cosa: No sé si os habéis fijado pero Jordy Smith surfea con una tabla blanca sin ningún tipo de publicidad. Que quiere decir esto. No ha llegado a ningún acuerdo con la casa comercial que le llevaba hasta hace bien poco y ha decidido echar un órdago. Sabe que tiene la sartén por el mango. Cualquier casa sabe que es el futuro del surf. Es joven, tiene talento y está destinado a ser campeón del mundo. Su surf es explosivo. Su físico imponente y la cabeza bien amueblada. Según se rumorea, la casa Nike le fletó un avión privado en Francia con la idea de sentarse con los directivos de la firma, así que la entrada de firmas hasta ahora no surferas está al caer. Al tiempo. Se mastica una estrella mediática.