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Lorenzo Mejino

Series para gourmets

Battle Creek: Una serie de policías trasnochada y anticuada

Los designios de las grandes cadenas estadounidenses suelen ser inescrutables para la mayoría de los mortales y como en el caso de que les vamos a hablar hoy , “Battle Creek”, un guión escrito en 2002 puede ser recuperado del fondo de un cajón, porque su autor Vince Gilligan (Breaking Bad) se ha convertido en toda una estrella televisiva y los ejecutivos huelen dinero fácil en ese producto.

Por desgracia, utilizar ese sambenito publicitario que consiste en decir “De los productores de …“ o “Del creador de …” , no siempre suele funcionar y “Battle Creek”  es un claro ejemplo de que una serie que a priori tiene algunos de los mejores ingredientes de la actualidad acaba siendo un mero “León come gamba “ televisivo ,como les vamos a explicar en este articulo, sobre una de las  grandes decepciones del año.

Ficha: Battle Creek 13 episodios.   Mar 2015-May 2015  Cadena: CBS( USA)/Movistar + series (E)

Sinopsis: El agente del FBI Milt Chamberlain es enviado a una oscura población del estado de Michigan, Battle Creek a abrir una oficina de enlace con la policía local, que no le recibe precisamente con los ojos abiertos, con el detective Russ Agnew como principal opositor a su llegada. Ambos se ven obligados a colaborar desde el principio y vencer sus diferencias para esclarecer un doble asesinato relacionado con las drogas.

El inicio: Vince Gilligan, al finalizar su trabajo como guionista de “Expediente X”, empezó a probar suerte en solitario, escribiendo pilotos para nuevas series hacia el año 2002.

El primero que escribió “Battle Creek”, captó la atención de la CBS, que le compró el guión y empezó a pensar en el rodaje del piloto, que nunca llegó a pasar la fase de pre-producción, por no encontrar un reparto que pudiera satisfacer a la cadena, por lo que fue postergado y olvidado en el armario de los proyectos rechazados.

Hace dos años, viendo el enorme éxito de crítica y público que tuvo  “Breaking Bad”, algún avispado ejecutivo de la CBS recordó que tenían un piloto de ese nuevo genio que era Vince Gilligan y que había una posible oportunidad de negocio para aprovechar su fama.

Gilligan   les informó de su imposibilidad de involucrarse directamente en el proyecto, por estar trabajando en la precuela de “Breaking Bad”, “Better Call Saul”, pero no puso ningún impedimento a que otra persona llevara las riendas de la serie a partir de su piloto, sobre todo cuando el elegido fue David Shore ( der) , el creador y productor ejecutivo del gran éxito que fue “House M.D.”.

Shore reescribió el piloto, actualizándolo con referencias actuales y eligió el reparto de acuerdo con Gilligan que fue el único momento en que tuvo cierta implicación con la producción de la serie. Con un encargo en firme de una 1T de trece episodios, para la dirección del piloto, Shore involucró a su buen amigo y socio Bryan Singer ( Sospechosos habituales, X-Men, el piloto de House) y el supuesto dream-team ya estaba formado.

El estreno de la serie en el mes de marzo de este año, llenó de perplejidad a la crítica estadounidense, que no podía entender como este trío de reputados y conocidos autores, podía haber creado una serie tan inocua y trasnochada ,mas digna de la televisión comercial de los ochenta, que de la época actual.

La recepción del publico fue mas bien fría en el primer capitulo y fue a peor en los siguientes, ante la decepción que le causaba la vulgaridad de lo que veía en la pantalla y que merecía que todos sus responsables estuvieran en el lugar de la siguiente foto por la tomadura de pelo que suponía.

La trama: La serie tiene una estructura de procedimental con dos policias colegas, que al conocerse empiezan con grandes reticencias, para ir evolucionando en su relación hasta conseguir ser grandes amigos.

La 1T desarrolla principalmente esta relación, por un lado tenemos al agente del FBI elegante y deslumbrante en su nuevo destino, al que ha llegado rebotado por un problema, mientras que por el otro, tenemos a un agente desastrado y bastante quemado, por la pobreza de medios que tiene el departamento de la policía local de Battle Creek.

El contraste entre ambas personalidades y metodologías, la tecnológica con los últimos adelantos de la ciencia, frente a la clásica y sin recursos, subyace en todas las investigaciones de los delitos de relativamente poca importancia que deben investigar, como pueden ver en el trailer que muestra esas diferencias.

El esquema de “buddy-movie” o serie de colegas, sigue todos los estereotipos imaginables, bueno-malo, elegante-desastrado, ligón- solitario, amable-arisco, etc, etc, etc, que hemos visto mil veces en series del siglo pasado y que se reproducen sin apenas novedades.

Los actores secundarios se reducen a los compañeros agentes, todos ellos con su característica diferencial y arquetípica, utilizada básicamente para llenar las tramas “B” y “C” de cada episodio, siempre subordinada al delito semanal que debía resolver nuestra pareja protagonista.

La ubicación de la trama, una ciudad gris y sin ningún atractivo como Battle Creek ( 50.000 hab) en el estado de Michigan, no invitaba tampoco a quedarse mucho tiempo en esa ciudad, sino mas bien a salir corriendo de la misma, y no volver nunca mas, y solo con las imágenes de la cabecera ya se pueden hacer una idea de ese lugar tan “cosmopolita”.

La endeblez de los delitos que debían investigar no ayudaba demasiado a captar el interes del espectador, especialmente uno que dedicaron a un mafia de productores de sirope de arce, que en otra cadena habría sido motivo de cancelación fulminante, por malgastar el talento en semejante sandez.

Otro cliché habitual en este tipo de series, son las inacabables conversaciones sobre lo humano y lo divino entre los dos protagonistas, ya sea conduciendo en el coche o en misiones de vigilancia, como pueden comprobar en el siguiente video:

En mi caso, el principal misterio de la serie era descubrir como tantas mentes brillantes que habian demostrado su competencia en grandes series ( muchos de los guionistas venían de trabajar con David Shore en House M.D), habian conseguido anularse mutuamente y hacer una serie, donde lo mas destacado es el olor a naftalina que desprende desde la primera escena del piloto.

Su tono está a la misma distancia entre la comedia y el drama , pero desgraciadamente no a mitad de camino, porque está tan alejado de una buena comedia o un buen drama, que el recorrido es tan largo que tiende a ser el mismo debido a la distancia sideral a que se encuentra de ambos.

Para mi, ha sido, sin duda alguna, una de las grandes decepciones del año, porque para ver una cosa que ya veia hace treinta años, en series mejores como “Magnum P.I”, o “Simon y Simon” no hacia falta reunir a esa gente, a base de extender un generoso talonario, que es la única razón que puedo entender para explicar semejante desaguisado.

Si les gustan las series inofensivas y muy sencillas de ver para pasar un rato muerto delante del televisor, como las de policías del siglo pasado, pueden darle una oportunidad, siempre y cuando tengan claro, que no tiene nada que ver con ninguno de los trabajos mas distinguidos de ninguna de las personas implicadas, ni delante ni detrás de la cámara.

Los actores:
Josh Duhamel es un actor que empezó su carrera como modelo, para pasar a hacer de macizorro en el culebrón matinal “All my Children” y de allí a su papel conocido como el protagonista de la serie escapista “Las Vegas”;  en paralelo sus apariciones en la saga Transformers le han dado una cierta fama, ademas de su vida fuera de las pantallas.

Duhamel siempre me ha parecido un actor muy unidimensional, en plan guaperas simpático y elegante, algo bribonzuelo, y este papel del agente Milt del FBI estaba cortado a su medida, haciendo algo muy parecido a su Danny de “Las Vegas”, con los mismos gestos y mohines que cansan bastante rápidamente. El problema es que su química con su compañero de fatigas era nula y al centrarse la serie en esa relación, la serie se hundía irremediablemente en esas conversaciones de patio de colegio, que ambos mantenían.

Dean Winters es mucho mejor actor que Duhamel y con un registro mucho mas amplio, como ha demostrado en grandes papeles en “Oz”, “Rescue Me” o “Ley y Orden”, y su papel como el resentido agente local Russ Agnew, tenía mas recorrido.

Pero Winters, se ve arrastrado por el marasmo general, en especial en sus patéticos intentos por conquistar a una empleada del departamento que ahora serían infantiloides hasta para una serie de “Clan”, en su peor actuación que le recuerdo.

Malgastar a una gran actriz como la británica Janet McTeer, dos veces nominada al Oscar, en un papel tan insustancial como la jefa de policía de Battle Creek, debería ser delito y los culpables de semejante atrocidad deberían tener una orden de alejamiento de los platos de por vida.

Era lastimoso, ver a una actriz con su clase, perder el tiempo regañando a sus agentes y verla involucrada en tramas personales insustanciales ante las que poco podía hacer.

En el capitulo de bultos del departamento, con dos o tres escenas por episodio y a los que nadie echaba en falta si no los veía, tenemos en primer lugar al procedente de “House M.D.”, Kal Penn, un actor ideal para cubrir la cuota racial en cualquier serie, siempre y cuando no se le pida actuar demasiado porque no es lo suyo, al poner siempre la misma cara de sorpresa, haga lo que haga. De hecho Penn es mas conocido por su activismo político en el partido demócrata, llegando a ocupar cargos de responsabilidad en la administración Obama, que por sus cualidades artísticas.

Aubrey Dollar ( izq), está especializada en papeles secundarios de vecinita de al lado ( Point Pleasant, Women´s murder club) y aquí es la secretaria del departamento, por la que suspira el detective local protagonista, en una de las peores tramas de la serie, que ya es decir, y en las que ella tiene su gran parte de responsabilidad.

Epílogo:
Como es habitual en estos casos, parece que todo el mundo se lo pasaba mejor rodando la serie, que lo que nosotros acabábamos viendo en la pantalla, y como muestra el típico vídeo del rodaje de “Battle Creek”.

La serie finaliza de forma algo rara su 1T, con un pequeño cliffhanger, pero que debido a ser cancelada antes de su emisión, nadie va a saber como lo resuelven, aunque me parece que a nadie le importaba demasiado, ya que las voces de queja frente a su cancelación han sido tantas como espectadores televisivos de un partido de liga de hockey hierba, por lo que ha pasado al panteón de series fallidas del 2015, en un lugar destacado.

Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima

Lorenzo Mejino

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Sobre el autor

Series para gourmets nace con la pretensión de ayudar a personalizar su menú televisivo con el panorama mundial de series. Cada lunes hablaremos de series remotas ni estadounidenses ni británicas, no estrenadas en nuestro país. Cada miércoles de series actuales estrenadas aquí y los viernes recordamos series del pasado de la televisión

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