Nuestra semana dedicada a las series políticas va a efectuar su segunda parada en el Reino Unido, país con gran tradición en este género con ejemplos como la serie original de “House of Cards”, “ A Very British Coup” o “Si, Ministro” , que nos han mostrado tanto desde la sátira como desde el drama, muchos aspectos de la política inglesa.

La serie de la que les vamos a hablar hoy “ Secret State”, es una mas que digna heredera de esas magnas series y consiguió tejer en sus escasos cuatro capítulos, un entramado de historias e intereses ficticios, pero con demasiada base real como para no hacernos pensar en ellos.

Si a eso le añadimos unas interpretaciones del mas alto nivel, no se nos podía ocurrir un mejor representante ( y que no hubiera estado presente en el blog) para el apartado de series políticas recientes, el estado secreto ( Secret State) que mueve los hilos invisibles de la política mundial.

Ficha: Secret State 4 episodios.  Nov 2012  Cadena: Channel 4 ( USA)/Sundance Channel (E)

Sinopsis: En el transcurso de una campaña electoral para la elección del parlamento británico, se produce un devastador accidente industrial con muchos fallecidos, cerca de Newcastle en las instalaciones de una planta petroquimica propiedad de una multinacional americana. El primer ministro viaja a los EUA, para pedir explicaciones sobre el suceso y exigir reparaciones y compensaciones acordes con el daño, pero a su vuelta sufre un accidente de avión donde perece junto con su séquito.

El viceprimer ministro Tom Dawkins, acaba sustituyendo a su amigo fallecido y se encuentra con un enorme caso de conspiración y corrupción relacionado con ambos accidentes, que implica a mucha gente poderosa a ambos lados del océano, que van a hacer todo lo posible, para que nada de todo ello salga a la luz.

El trailer de la miniserie, les va a arrojar luz sobre la dura premisa que va a desarrollar.

El inicio: Chris Mullin era un periodista que  posteriormente fue  diputado durante veintitrés años adscrito al  ala izquierda del partido laborista que escribió en 1982 una novela de política ficción titulada “ A very british coup” sobre un oscuro y honrado diputado de izquierdas laborista que llega a ser primer ministro, donde se da de bruces con los poderes fácticos que van a masacrar todas sus pretendidas políticas de reformas, con el trasfondo de la energía nuclear.

La novela fue todo un éxito y Mullin ( vestido de vicario en la foto) accedió a vender sus derechos para una versión televisiva estrenada en 1989, titulada tambien “A Very british coup” y que arrasó en los premios BAFTA de ese año, y de la que pueden ver un pequeño corte en el siguiente vídeo

La serie quedó grabada en la memoria de muchos espectadores británicos, como sucedió con “House of Cards” estrenada con posterioridad, por lo que no sorprendió a mucha gente, cuando el Channel 4 británico, decidió encargar una nueva versión de la historia a un guionista de prestigio como Robert Jones ( The Bill ,Murder: Joint Entreprise)

Tras leer la novela y ver la miniserie, Jones tomó la decisión de alejarse voluntariamente de ambas fuentes dejándolas unicamente como fuente de inspiración y no hacer otra versión del libro como ocurrió con la miniserie original.

Adaptar la serie a los tiempos y a las amenazas actuales fueron su mayor reto, cambiando las partes que habían envejecido peor de la novela en su adaptación televisiva, reinventando por completo la historia.

La serie fue estrenada con un gran éxito de crítica en el minoritario Channel 4 británico, donde se convirtió en una verdadera obra de culto y vendida a multitud de países por la gran calidad de su historia

La trama: La miniserie tiene el hilo conductor de Tom Dawkins, el viceprimer ministro británico, y su ascensión interna como Premier del Reino Unido y tiene su punto narrativo de partida en una catástrofe industrial, de la que se tienen amplia sospechas que ha sido debida a la negligencia en el mantenimiento y la seguridad por parte de la multinacional propietaria de la factoría.

La primera escena con Tom Dawkins, caminando entre los escombros de la fábrica directamente nos pone en situación ante la dureza de lo que vamos a presenciar

Tras la cadena de acontecimientos que desembocan en su elección, siempre con la aquiescencia de los poderes fácticos que consideran que va a ser mas controlable una persona oscura, conciliadora y de perfil político bajo, todos descubren que el gatito en el fondo era un león mucho menos domesticable de lo que pensaban.

Como ejemplo, tienen este vídeo con  la primera reunión en que preside su gabinete, donde un ministro le espeta de buenas a primeras, para marcar territorio, que debe recordar siempre quienes son sus amigos que le han puesto ahí, y su respuesta cortante e hiriente, donde le dice que solo se va a acordar de los votantes que le han puesto ahí.

La investigación del grave accidente centra su gestión politica, ya que la empresa propietaria ha seguido los pasos habituales para escurrir el bulto de toda responsabilidad; a) Atribuir el desastre a un error humano, de una persona ya fallecida b) eludir toda responsabilidad o conocimiento de malas praxis en su fábrica y c) campaña de distracción mediatica para capear el temporal de la mayor manera posible.

La colaboración de una periodista de investigación que descubre muchos trapos sucios sobre la corporación industrial es el inicio de una guerra soterrada entre el solitario Tom Dawkins y ese estado secreto que tiene muchos mas tentaculos de los que puede imaginar.

La serie se plantea como una lucha del David idealista, que representa el primer ministro, y con el que todos los espectadores empatizamos por ser el tipo de político que deseariamos que guiará nuestros intereses, contra el Goliath corporativo que se presenta como un imperio del mal, que está introducido a todos los niveles y cuyos únicos intereses son mantener el status quo, que tanto beneficios le produce, y que contabiliza las vidas humanas como daños colaterales .

La progresiva soledad a la que se ve abocado Tom Dawkins, por todos los estamentos militares, economicos y politicos, en su afan por ser honrado y tirar de la manta, no deja de producir una cierta desazón entre el público ante esa imposibilidad de sacar la verdad a la luz, ante las toneladas de detritus de todo tipo, con que van a intentar enterrar al pobre Tom Dawkins.

Es una serie excelente y con una magnifica descripción de los hechos, que llegan a asustarnos solo de pensar que una parte de ella fuera verdad, como desgraciadamente parece que es el caso, pero por ello es una de las series políticas con las que mas he disfrutado en los últimos tiempos.

Las interpretaciones son de un enorme nivel, tanto a nivel del protagonista, como de una galeria de secundarios que cumplen a la perfección, sumergiéndonos en todo momento en las intrigas que rodean el 10 de Downing Street y Whitehall.

Debido a su escasa duración , la devoré en un escaso fin de semana, y siempre ha sido una de las series que mas fervientemente he recomendado a los amantes de las series políticas, por lo que les hago extensiva la misma si se encuentran en ese caso.

El único pero que le encontré en el momento de su visionado, fue una cierta tendencia, presente en otras series de un estilo parecido, de “canonizar” a Tom Dawkins, mostrándolo como demasiado bueno como para ser real, pero ante la multitud de maldades y trapacerias de sus rivales, es una sensación que solo aparecía en ciertos momentos de la serie pero que creo que es mi deber compartir con ustedes.

En estas miniseries de tan corta duración, intento no explicar demasiado sobre el desarrollo de la trama, por lo que prefiero dejarles con el siguiente video, para que vean las historias tras el rodaje de la serie

Los actores:
Gabriel Byrne es un actor irlandés, que tiene un gran olfato para elegir sus papeles que suele bordar con grandes actuaciones, con ejemplos en cine desde como “Sospechosos habituales” o “Muerte entre las flores” o en televisión como “In Treatment” o “Quirke”

No deja de ser curioso que un irlandés de pura cepa y orgulloso de pregonarlo a los cuatro vientos, haya interpretado uno de los mejores premiers británicos de la historia televisiva, con una interpretación muy contenida y mostrando esa angustia y amargura de la impotencia que va creciendo en su interior al no conseguir hacer lo que es correcto y justo, y que le va carcomiendo.

Byrne está majestuoso y destacar entre toda la pléyade de grandes actores que le rodean en todas las escenas está al alcance de muy pocos entre los que se encuentran Byrne y otro de sus compañeros en el reparto el gran Charles Dance

Charles Dance es un actor al que admiro profundamente desde que lo vi debutar en “La joya de la corona” y que tiene el gran mérito de estar siempre perfecto, por pequeño e insignificante que sea el papel en que aparezca. Su mayor fama le ha llegado en la actualidad al interpretar al patriarca Lannister en la excelente “Juego de Tronos”, pero personalmente me duele reducir mas de treinta años de grandes e inolvidables personajes a su aparición en una serie mediática.

Su papel de John Hodder, secretario del gabinete, una de las personas mas intrigantes y maquiavélicas del entorno del gobierno, es uno de sus mejores papeles en una larga carrera cuya última pieza fue un gran personaje en la serie australiana “Deadline Gallipoli”.

La última persona que vamos a destacar del gran elenco que aparece en la serie es Gina McKee, la periodista de investigación que destapa muchos mas trapos sucios de los que se esperaba al investigar el accidente industrial.

Hija de un minero, McKee no lo tuvo fácil para convertirse en una actriz de prestigio, ya que tuvo que pasar muchos años en pequeños papeles secundarios, hasta conseguir sacar la cabeza como la intrigante Caterina Sforza, en “Los Borgia” y subir al primer nivel de actrices con grandes papeles en “Line of Duty” o “By any Means”.

Podríamos seguir con la presencia de grandes actores como Stephen Dillane o Rupert Graves, pero no vamos a extenderlo mas por la poca presencia global de sus personajes.

Epilogo:
“Secret State” es una serie magnífica y altamente recomendable, estrenada en España sin mucha promoción, en un canal especializado como el Sundance Channel, por lo que no tienen ninguna excusa, puesto que se encuentra disponible para su disfrute, como pueden comprobar en el siguiente avance de su estreno español

Si no conocen la serie, vuelvo a aprovechar este último párrafo para recomendársela, en especial si tienen un cierto interés por los temas políticos , con la ventaja de que la escasa inversión en horas que representa su visionado va a ser recompensada con un verdadero disfrute de una serie de alto calibre.

Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima

Lorenzo Mejino