>

Blogs

Lorenzo Mejino

Series para gourmets

Marco Polo: Un viaje muy lujoso que no lleva a ninguna parte

Uno de los acontecimientos mas importantes de este año a nivel audiovisual, es el desembarco del gigante estadounidense Netflix en nuestro país con su oferta de películas y series de acceso directo vía internet por una cuota mensual fija.

No es misión nuestra analizar desde el punto económico las repercusiones que puede tener ese aterrizaje en el panorama audiovisual español, pero en cambio nos brinda la oportunidad de hablarles de bastantes series producidas exclusivamente por Netflix y no habían llegado a nuestro país por los canales tradicionales o de pago, al reservárselas Netflix para su lanzamiento.

Por ello nada mejor que empezar por una de sus primeras producciones originales que desde ayer están disponibles en su catálogo, como es el caso de “Marco Polo”.

Marco Polo es un buen ejemplo del tipo de serie que produce Netflix con un nivel de calidad medio bastante aceptable, pero con fallos evidentes y que en nuestra opinión está muy lejos de la adoración incondicional que algunos tienen hacia sus productos solo por llevar su marca y gracias al sistema que  les permite devorarlos compulsivamente en un fin de semana, lo que parece que les haga subir varios enteros automáticamente en su valoración, independientemente del resultado final.

Ficha: Marco Polo 10+ episodios.   Dic 2014- Netflix (USA) Netflix (E)

Sinopsis: Marco Polo es el hijo de un mercader veneciano Niccolo Polo que acompaña por primera vez a su padre y a su tío en el viaje de la ruta de la seda, para realizar intercambios comerciales entre China y Occidente. Al entrar a rendir tributo a Kublai Khan el emperador de los mongoles, para permitirles su paso por su imperio, este se muestra muy decepcionado al no traerle los mercaderes las cosas y personas que les había pedido en su último paso por su palacio.

Los mercaderes deciden aplacar su ira, dejando al pobre Marco Polo en la corte de Kublai Khan a modo de prenda, a medio camino entre un invitado y un esclavo para poder proseguir su viaje hacia China. La serie narra la estancia del veneciano en la corte.  donde debe aprender a sobrevivir en un entorno desconocido y hostil para un occidental

El inicio: John Fusco era un guionista cinematográfico que empezó su carrera con “Crossroads” de Walter Hill en el año 1986, y ha ido trabajando de forma regular en películas de presupuesto medio alto como “Thunderheart” o “Spirit”.

Gran admirador de la cultura china y un  experto en artes marciales con muchos viajes por la zona durante toda su vida, tenía a la figura de Marco Polo como su máximo ídolo histórico y tras enfrascarse en el guión de “The Forbidden Kingdom” , decidió que su próximo proyecto debía ser una serie sobre la vida de Marco Polo y en concreto no tanto de sus viajes, sino de los diecisiete años que pasó en la corte del emperador mongol Kublai Khan, un periodo apenas documentado en sus biografias.

Su idea no era fácil de vender y de hecho se encontró con  muchos problemas hasta que consiguió el apoyo de uno de los productores mas influyentes de Hollywood, Harvey Weinstein, con el que había trabajado anteriormente y que era otro gran admirador de la cultura oriental.

En principio ambos vendieron la idea a la cadena Starz, pero finalmente fue rechazada por considerarla demasiado cara, por lo que se dirigieron a Netflix que estaba empezando a producir sus propias series, y estaba sedienta de contenidos originales para empezar su expansión en ese campo.

Netflix vio que la propuesta encajaba perfectamente en su estrategia de mercado y les encargó una 1T de 10 episodios, con un presupuesto mas que generoso para poder reproducir con la mayor fidelidad posible  la época histórica y la ambientación de la corte del emperador mongol.

Debido a la falta de experiencia televisiva de Fusco ( izq) se incorporó como showrunner el director Daniel Minahan ( der) , un habitual realizador de las series nobles de HBO, para organizar los aspectos estéticos y de producción de un proyecto tan ambicioso.

La serie se estrenó con el sistema habitual de Netflix, dejando disponibles los 10 episodios a la vez en Diciembre de 2014 y la acogida de la crítica fue bastante negativa, recibiendo bastantes mas palos que los habituales, por considerarla una serie visualmente atractiva, pero fallida en su contenido. Debido al sistema Netflix, es imposible conocer las audiencias que tuvo, por lo que la única referencia era el ruido generado en redes sociales y en este sentido el sonido de un congreso de grillos  es el que mejor define su impacto mediático.

Como primer vídeo les dejo el trailer promocional de la serie.

La trama: La serie se centra en la estancia de diecisiete años de Marco Polo en la corte de Kublai Khan, descendiente de Gengis Kahn y que gobernaba con mano de hierro el vasto imperio mongol, y que tenia entre ceja y ceja su expansión hacia China para aumentar sus tesoros y riquezas.

La serie se inicia con la llegada de Marco Polo acompañando a su padre y a su tío, y su impactante llegada a la enorme corte, la pueden ver en el siguiente vídeo, comentado por el propio creador John Fusco

Tras ser abandonado a su suerte por su padre en la corte para proseguir su camino, vamos siendo testigos de  la adaptación del joven veneciano a los usos y costumbres de la corte siempre sujeta a las caprichosas veleidades del gran Kublai Kahn.

La serie desarrolla dos tipos de historias, por un lado las que se desarrollan intramuros del palacio, centradas en el personaje de Kublai Khan y su entorno, formado por su mujer la emperatriz, su harén de concubinas, sus hijos naturales y bastardos, y finalmente sus consejeros y ministros de confianza, provenientes de diversos lugares de su imperio.

Las intrigas palaciegas y las luchas de poder entre los descendientes centran buena parte de los problemas, donde llega como un marciano el pobre Marco Polo, que se ve obligado a hacer amigos que le protejan frente a los enemigos que desconfían tanto de su origen como de sus intenciones.

En un segundo termino tenemos las aventuras de expansión militar del imperio mongol, que encuentra su suela del zapato en la fortaleza china de Wuchang, gobernada por el canciller Sidao hombre de confianza del emperador de la dinastía Song, que se ha convertido en un baluarte inexpugnable para las tropas mongolas.

El nexo de ambas historias externas e internas es la figura de Marco Polo al que le coge un cierto cariño el despiadado Kublai Khan y decide educarle , poniendo a sus mejores profesores a enseñarle todas las artes marciales y guerreras necesarias para convertirse en un buen combatiente, entre las que destaca su profesor de Kung Fu, un monje invidente, pero excepcionalmente dotado para la lucha.

A pesar de las reticencias y las envidias de algunos, el Khan le toma un cierto cariño al italiano, ya que tiene en consideración que su visión de las cosas es muy diferente a la de todos sus consejeros y le puede proporcionar un punto de vista mas sincero e independiente que el de su corte que básicamente le dice siempre lo que quiere escuchar, so pena de sufrir su ira si le incomodan.

La acción va oscilando entre la corte mongola y la fortaleza china, lo que nos permite ver varias estrategias guerreras, la fuerza bruta mongola enfrentada a la sutileza y astucia china, muy influenciada por Sun Tzu, una pugna en  la que va a jugar un papel importante Marco Polo, para decantar las cosas con su inteligencia e ideas innovadoras en el campo armamentístico

El sexo juega un papel importante en ambos bandos, pero mas como moneda de intercambio o de dominación que desde un punto de vista erótico, a pesar de la profusión de desnudos que vemos de todas las amantes y concubinas de ambas cortes que dan una sensación similar a las que proporcionan los cuadros de desnudos, belleza pero frialdad.

La forma en que trata el sexo, es un buen referente para describir la serie, ya que es un envoltorio lujoso con una ambientación impecable, pero desprovisto por completo de un alma o de un interés que consiga atrapar al espectador mas allá de ver una colección de postales de hermosos paisajes, lujosos trajes y mujeres desnudas.

La falta de un vigoroso pulso narrativo va creciendo a medida que avanza la serie con largos tramos lentísimos en los que tenemos la sensación de pasear por un museo de antigüedades, ante la inanidad de los diálogos de los cortesanos y sus intrigas de opereta, que no interesan ni a los aburridos figurantes que están allí plantados, esperando cobrar su cheque a final de día.

Las escenas exteriores muestran bastante personal, pero poca cosa mas porque adolecen de movimientos de tropas y de unas escenas bélicas consecuentes con los enormes ejércitos que se suponen que están luchando. En una producción con tanto presupuesto no es muy coherente explicar una de las batallas principales con un cuadro y una voz en off que explica lo que ha pasado o abusar del plano corto en las luchas para ahorrarse figurantes o especialistas.

A pesar de estas incoherencias, las peleas a dos  harán las delicias de los aficionados a las artes marciales, por el gran esteticismo de las mismas, como pueden ver en el siguiente vídeo que explica el rodaje de las mismas

A todos estos problemas le añadimos el mas grave, la  pésima elección del actor protagonista, el italiano Lorenzo Richelmy que desentona en todo momento delante de la pléyade de magníficos actores de origen asiático que se lo comen vivo en cada escena que tienen con él. Richelmy es un lastre enorme para la serie, inexpresivo hasta limites insospechados e incapaz de transmitir la grandeza del personaje que interpreta, no pasando de ser un becario torpe al que le han dado el papel de su vida, tras dedicar su carrera a las fotonovelas.

El hecho de que todo el mundo hable ingles con uno u otro acento hace que se pierdan los innumerables malentendidos lingüísticos, que son parte primordial de la diplomacia oriental y el hecho de ver a un chino y a un mongol negociar directamente en ingles sin traductores en plena estepa, suena raro y poco creíble, tampoco es uno de los problemas mas graves de la serie, pero al ser un hecho habitual, solo lo dejo caer sin hacer mas sangre del tema.

En el apartado positivo, tenemos la magnifica ambientación y paisajes de la serie y el esfuerzo de todos los actores asiáticos por sobresalir por encima de la pastosidad de la trama que les toca interpretar con mención especial para los dos antagonistas, un fabuloso Benedict Wong como el Kublai Kahn y el magnifico Chin Han como el hierático y astuto Jin Sidao que son los que salvan la función en todo momento.

Marco Polo es una serie entretenidilla pero muy irregular, que alterna grandes aciertos con errores clamorosos y en estos casos siempre es difícil recomendarla a nivel general, porque la ponderación de unos y otros varía muchos según sus gustos. Si sus preferencias van por las series históricas de aventuras exóticas, de ritmo pausado y perfectamente ambientadas, seguramente le puede interesar. Si por el contrario, las costuras que les hemos indicado, son de las que les molestan en sus series, siempre puede intentarlo con este aviso para navegantes que les hemos dejado.

Personalmente no me ha dejado muy convencido y tengo que reconocer que se me ha hecho bastante larga la temporada, en especial la primera mitad de la misma que es la que avanza de forma mas reumática, remontando algo en el tramo final ( algo bastante habitual en las series de la factoría Netflix), no tengo nada claro si voy a continuar en la 2T y si lo hago será porque la cosa mejora ostensiblemente, en especial el protagonista. La sensación de desaprovechar una historia interesante y un presupuesto generoso es la que prevalece en mi impresión de esta 1T de la serie.

Los actores:
Los creadores de la serie tuvieron siempre muy claro que querían que un actor italiano fuese el que interpretara a Marco Polo, pero cuesta mucho de creer que un director de casting medianamente competente, no encontrará a nadie mejor que el desconocido hasta en Italia, Lorenzo Richelmy para este importante papel protagonista.

No culpo al pobre actor que hace lo que puede, pero es que sencillamente no da la talla y el papel le viene enorme y las consecuencias son nefastas para el conjunto de la serie, ya que solo por ser atractivo, tener abdominales y hablar ingles con acento italiano no basta para llevar el peso de esta superproducción y como en el fútbol, los culpables son los que le han puesto ahí

Por suerte el director de casting tenía muchos mejores contactos entre los actores de origen asiático y la elección de Benedict Wong, para dar vida al Kublai Khan así lo corrobora. El británico Wong era un habitual secundario en algunas de las series mas importantes de su país, como “Spooks” o “The Wrong Mans” en papeles casi siempre étnicos de mafioso chino o similares.

Wong esta magnifico y es la principal razón para ver Marco Polo, porque transmite en todo momento las contradicciones de un emperador absolutista, despiadado y encarnizado con sus enemigos y tierno y cariñoso con las que personas que quiere y aprecia, como el propio Marco Polo. Los cambios de animo en una sola escena son su mayor mérito y salva la función por completo.

Joan Chen ha tenido una carrera mas fructífera con momentos álgidos de fama a principios de los noventa con su presencia en “El último emperador” de Bernardo Bertolucci y en la serie “Twin Peaks” de David Lynch. Su carrera posterior ha ido alternando papeles en los EUA y en China, con clara preferencia artística para los segundos, ya que en Hollywood la tenían encasillada como belleza asiática, y la ponían a repartir mamporros con Steven Seagal, Sylvester Stallone y similares.

Siempre me ha parecido una actriz demasiado fría, incluso en sus actuaciones mas reputadas y aquí sigue en su linea como la emperatriz Chabi, persona de la máxima confianza del emperador.

El segundo gran acierto fue elegir al gran actor de Singapur Chin Han, para el papel del canciller Sidao, máximo enemigo de los mongoles, desde su fortaleza de Wuchang que defiende la entrada a China.

Han hizo casi toda su carrera en la industria cinematográfica de su Singapur natal, hasta dar el salto a Hollywood, donde ha aparecido en pequeños papeles en el “El Caballero Oscuro” o en “Capitán América. Soldado de Invierno” , para volver a su tierra para protagonizar la primera serie de HBO Asia, “Serangoon Road”. Chin Han tiene una presencia de las que traspasa la pantalla y es una pena que no lo viéramos interaccionar mas con Wong, porque las suyas eran las mejores escenas de la serie.

Epilogo:
Ya les he comentado que la serie ha sido renovada para una 2T, pero de la que no se ha comunicado la fecha de estreno, pero no debería tardar demasiado en ser anunciada.Para finalizar les dejo con la exquisita cabecera de la serie que como la propia serie es tan exquisita como fría en transmitir sensaciones al espectador

La llegada de Netflix a nuestro país es todo un acontecimiento que puede producir cambios en sus hábitos de consumo, por ello hoy les hemos querido analizar una primera muestra de sus contenidos, la serie histórica Marco Polo que con las informaciones que les hemos suministrado podrán dilucidar o no si es de su posible interés.

Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima

Lorenzo Mejino

Propuestas para su menú televisivo

Sobre el autor

Series para gourmets nace con la pretensión de ayudar a personalizar su menú televisivo con el panorama mundial de series. Cada lunes hablaremos de series remotas ni estadounidenses ni británicas, no estrenadas en nuestro país. Cada miércoles de series actuales estrenadas aquí y los viernes recordamos series del pasado de la televisión

Entradas recientes


octubre 2015
MTWTFSS
   1234
567891011
12131415161718
19202122232425
262728293031