Las vacaciones veraniegas del mes de agosto están a la vuelta de la esquina para la mayoría de ustedes, lo que representa un grave problema para el seriéfilo de pro, que debe compaginar su pasión por las series televisivas con sus actividades vacacionales.
Por ello en nuestro blog y con la vocación de servicio público que nos caracteriza, hemos decidido echarles una mano, para aconsejarles tres series de corte histórico que se han estrenado este mismo año y que pueden ser el mejor acompañante de sus siestas veraniegas tras un día de sol y una comida opípara, lo que les va permitir afirmar que han visto la serie mientras estaban en los brazos de Morfeo, porque les puedo asegurar que poco se van a perder.
No deja de sorprender la coincidencia en el tiempo y en tres canales diferentes de tres series ambiciosas ambientadas en determinados periodos históricos, con actores conocidos y de cierto tirón y creadas por guionistas que han demostrado su competencia en otros trabajos, pero que en este caso como si de una extraña conjunción astral se tratara, solo han conseguido hacer tres engendros indigestos donde la parte histórica es indigna hasta de un sketch de Arévalo.
Decorados de cartón-piedra con rodajes en países centroeuropeos o africanos, ambientación y maquillajes dignos de un concurso de cosplay de una convención de héroes de segunda división, errores históricos de bulto y una desgana general por parte de todos los implicados que solo pensaban en despedir a su agente por convencerles de meterse en semejante embolado, son los factores comunes a las tres series que les vamos a analizar en esta entrada vacacional veraniega.
BRITANNIA: UN BREBAJE INDIGESTO DE CELTAS Y ROMANOS HECHO POR LOS DRUIDAS
Ficha: Britannia 9 ep Ene 2018- Cadena: Sky Atlantic (UK)- HBO (E)
Ubicada en el año 43 D.C, la serie desarrolla la ocupación romana de la isla de Gran Bretaña, ocupada por diferentes facciones de tribus celtas, entre las que destacan las de los Regni y los Cantii, enemistados a muerte, que no dudaran en aliarse con el invasor romano dirigido por el general Aulus Platius, para derrotar a su enemigo, en lugar de unirse contra la amenaza externa que se cierne sobre su isla.
Todo ello se sucede bajo la atenta mirada de los druidas muy poderosos, capaces de canalizar las fuerzas del inframundo y que eran temidos por los lugareños por su capacidad de lanzar hechizos y atraer desgracias a su gente, como pueden ver en el primer trailer
Britannia es la mejor serie del lote, pero no tanto por méritos propios sino por deméritos de sus otras dos compañeras, por lo que tampoco aguanta un análisis riguroso, con esa mezcla de la historia de la invasión romana condimentada con esos toques fantásticos y lisérgicos que proporcionan los druidas que al ir por libre parecen extraídos de un cómic de Asterix.
Creada por Jez Butterworth, un guionista de películas como ‘Edge of Tomorrow’ o ‘Spectra’, pero que apenas había trabajado para televisión, ‘Britannia’ tiene momentos en los que promete algo interesante, en especial cuando se centra en las relaciones de poder entre las tribus celtas y sus pugnas internas, pero se hunde rápidamente cuando la acción se traslada al territorio druida y sus contactos con los romanos, con momentos de auténtica vergüenza ajena, con los paisajes checos intentando colar como Anglia.
Un punto a su favor es su magnífico reparto con gente tan interesante como David Morrissey (State of Play, Red Riding, etc) que hace lo que puede en un papel tan mal diseñado como el del general Aulus Platius que podía haber dado mucho más juego que lo que ha acabado dando.
Tampoco puede salvar la función, la presencia de Kelly Reilly (True Detective, Yellowstone) como Kerra una fuerte y ambiciosa princesa guerrera celta ni un irreconocible MacKenzie Crook ( The Office) como el druida principal, bastante mejor la primera que el segundo, en el personaje más prescindible de toda la serie y fuente de todos los problemas narrativos de ‘Britannia’.
Ni se les ocurra aprovechar la serie para profundizar en sus conocimientos históricos de esa época, porque para eso mejor miran un documental, antes que esta historia que a lo mejor les puede entretener a ratos más de lo que lo ha hecho conmigo, aunque al lado de lo que viene, incluso parece buena, como pueden comprobar en el segundo trailer, correspondiente a su estreno español en HBO donde la tienen disponible.
KNIGHTFALL: LOS CABALLEROS DE LA MESA CAMILLA Y SUS INEPTOS GUIONISTAS.
Ficha: Knighfall 10 ep Dic 2017- Cadena: History (USA)/ HBO (E)
La huida de los caballeros templarios tras el sitio de Acre en Tierra Santa en 1291 en una de la cruzadas, provoca la perdida de la custodia del Santo Grial, el principal objetivo de la orden. Quince años más tarde el caballero Landry empieza a tener serias dudas sobre si debe seguir perteneciendo a la orden por no cumplir la misión de recuperar la reliquia en todo ese tiempo.
La muerte de su mentor le coloca al frente de la orden y cuando escucha noticias de que el Santo Grial ha sido avistado empieza toda una cruzada en Francia para recuperarlo y devolvérselo al papa Bonifacio VIII.
En principio las series de templarios y de las cruzadas siempre presentan un cierto atractivo inicial desde el aspecto de aventuras y espectaculares batallas, pero en el caso de ‘Knightfall’ solo se cumple en el caso de la primera escena bélica rodada en Dubrovnik, con una batalla naval de lo más resultona que prometía bastante, como muestra el trailer de la serie.
Todo fue un espejismo, porque se les acabaron las ideas en esa misma escena y se dedicaron a desarrollar aburridas historias de conspiraciones palaciegas y alianzas reales y papales, con los templarios deambulando como alma en pena casi tan aburridos como un servidor que no daba crédito al poco interés que tenia una serie que contaba nada menos con doce productores ejecutivos, entre ellos algunos de cierto renombre como el showrunner Dominic Minghella ( Doc Martin, Robin Hood).
El marasmo se apodera rápidamente de la serie, con los templarios peleándose hasta con su propia sombra pero con una escasa destreza en el uso de la espada que hacia que las escenas de acción fuera un verdadero tormento por su estulticia, con el protagonista Tom Cullen (Downton Abbey, Gunpowder) que no daba pie con bola ni actuando ni luchando.
Me hizo gracia ver a Jim Carter, el gran mayordomo Carson de Downton Abbey, en esta ocasión como el papa de Roma, un personaje maniobrero y manipulador que intentaba poner entre los reinos católicos, aunque fueran disparates históricos de marca mayor como un inexistente Reino de Cataluña como poder principal de la época, entre otros muchos errores de bulto en ese terreno de la documentación, con los paisajes checos volviendo a ser utilizados como Francia.
Por desgracia, la escasa traza de unos guionistas que suspenderían cualquier curso básico de historia medieval y el escaso carisma de todos los hermanos templarios intercambiables entre ellos, ha hecho que ‘Knightfall’ haya sido uno de los fracasos más sonados de la temporada.
TROYA: LA CAIDA DE UNA CIUDAD: LA TELENOVELA DE PARIS Y HELENA
Ficha: Troy: The Fall of The City Feb 2018- Abr 2018 Cadena: BBC (UK)-Netflix(E)
La miniserie desarrolla en su totalidad el sitio de trece años que tuvo Troya en el siglo XIII A.C a manos de las tropas griegas como represalia del rey griego Menelao al que su mujer Helena había dejado al huir para estar con el príncipe de Troya, Paris.
La historia empieza en el momento que se produce el inicio de la aventura entre Helena y Paris, que corren a refugiarse a Troya al ser perseguidos por las tropas espartanas, que rodean la ciudad iniciando el sangriento cerco que finalizó con la historia del conocido caballo de Troya, como muestran en el trailer original de la BBC que la emitió el sábado por la noche, supongo que oliéndose el percal, tras ver esto.
Una regla importante que se debe tener siempre en cuenta al adaptar una historia tan conocida como la que dio base a la Iliada y con tantas versiones, es la necesidad de aportar alguna cosa, por pequeña que sea, en la nueva adaptación, para evitar caer en un ridículo tan impresionante como el de ‘Troya’ un desastre audiovisual de proporciones homéricas (tanto del griego como del Simpson).
Cuesta mucho creer que un guionista como David Farr, que escribió la magnífica ‘El Infiltrado’ haya perpetrado semejante engendro desde todos los puntos de vista, porque nada funciona a no ser que se busque una hilaridad desde la primera escena, donde me quedé estupefacto viendo como practicaban una especie de cesárea a una mujer, varias decenas de siglos antes de realizarse la primera operación.
Por desgracia eso solo fue el inicio de una cadena de despropósitos que empezaban por la propia ambientación de la época de la serie rodada en Sudáfrica, donde veíamos a un gran actor como David Threlfall ( Shameless) desaprovechado al estar caracterizado como el villano de una fiesta de moros y cristianos de un modesto pueblo del levante español.
La pareja protagonista de los grandes amantes Paris y Helena estaba interpretada por Louis Hunter y Bella Dayne, que no dan la talla en ningún momento en especial en el caso de Bella Dayne, declamando y actuando como si estuviera en una fotonovela leyendo los bocadillos de la parte superior por no acordarse de sus frases.
Su mayor mérito es superarse en la inanidad a cada episodio, con unos diálogos impostados y teatrales que no llevaban a ningún sitio, para finalizar con la trama del caballo de Troya, con una estructura indigna hasta de una carroza de una cabalgata de Reyes de un pueblo calabrés.
La cantidad de talento desaprovechada en hacer una versión totalmente innecesaria de un clásico, debería ser estudiada en diversas tesis doctorales, porque merece una investigación esa concatenación de decisiones creativas tan nefastas, mal escritas y peor dirigidas.
‘Troya’ está disponible en nuestro país a través de Netflix, con un trailer como el siguiente y les juro que pagaría por tener los datos de cuantas personas han sido capaces de la heroicidad de finalizar semejante esperpento sin caer rendidos en un sopor reconciliante.
Hoy les hemos analizado tres compañeras ideales para sus siestas veraniegas o para engañar a los algoritmos de sus plataformas de pago, porque sinceramente no encuentro ninguna otra razón para perder el tiempo con ellas, como yo lo he hecho con mi vocación de servicio público.
Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima
Lorenzo Mejino