En muchos aspectos de la vida tenemos fenómenos fulgurantes que acaparan toda la atención y popularidad durante un corto periodo de tiempo para salir buscando la siguiente novedad. La contrapartida son los refugios seguros y fiables a los que siempre podemos volver como es el caso de la serie ‘Bosch’ una de las mejores series que hemos disfrutar durante los últimos siete años.
Su solidez y constancia ha sido increíble durante las siete temporadas, gracias a la base literaria de los libros de Michael Connelly y la increíble interpretación de Titus Welliver en el mejor papel de su larga carrera, por lo que nada mejor que dedicarle el espacio que se merece a una de mis series preferidas de estos últimos años, ideal para devorar con fruición durante las vacaciones veraniegas que ya están disfrutando o las tienen a la vuelta de la esquina.
Ficha: Bosch 68 ep ( 7T) 45 min Feb 2014-jun 2021 Cadena: Amazon Prime ( USA/ E)
Sinopsis: Hyeronimus ‘Harry’ Bosch es un detective de la policía de Los Ángeles de la vieja escuela, que se encuentra en medio de una demanda judicial civil por la familia de un delincuente al que disparó y mató en una persecución y que le ha tenido dos años en la nevera de asuntos administrativos a la espera de los resultados de la investigación de asuntos internos.
Al ser exonerado internamente empieza a investigar el caso del homicidio de un chico de trece años del que aparecen sus huesos en la montaña tras haber desaparecido hace veinte años y su aparente conexión con un suicidio acaecido en una mansión cercana.
El inicio: Michael Connelly es un autor de bestsellers literarios que empezó su carrera como periodista de sucesos en periódicos importantes de Miami y Los Ángeles, hasta que empezó a escribir novelas inspiradas en algunos de los crímenes que cubría como reportero. Su primera novela ‘The Black Echo’ fue publicada en 1992 y ya presentaba a su primer personaje importante, el detective Harry Bosch.
Sus novelas siguientes le permitieron dejar el periodismo y dedicarse de lleno a la literatura convirtiéndose en un autor muy prolífico con varios libros publicados al año.
Sus historias despertaron el interés de las productoras para adaptar su obra y vendió los derechos a Paramount para hacer una serie de películas basadas en sus libros. A pesar de intentarlo en varias ocasiones, ninguno de los guiones pasaba de la fase de escritura, lo que contribuyó a un elevado nivel de frustración de Connelly frente al futuro audiovisual de Bosch, su hijo literario predilecto.
De forma inteligente esperó casi veinte años hasta que expiraran los derechos iniciales de adaptación y liberado de nuevo, decidió tomar las riendas personalmente de sus adaptaciones controlando todos los detalles.
Para ello necesitaba, tres personajes claves para el desarrollo de su personaje, un productor, un showrunner y un protagonista.
El primer problema lo resolvió Connelly (centro) rápidamente al elegir a Henrik Bastin ( der) , un productor sueco que se había establecido en California y que le demostró su inmenso conocimiento de los libros y que a pesar de tener una productora modesta entró en perfecta sintonía con su forma de enfocar la adaptación en forma de una serie que dedicara uno o varios libros para cada temporada.
Con un productor de confianza en el saco, el siguiente paso era elegir al showrunner y lo que hizo Connelly era hablar primero con el único que conocía personalmente, Eric Overmyer (izq) , que llevaba más de treinta años trabajando en series pata negra como ‘St Elsewhere’ y ‘Homicidio’ para pasar a ser unos de los guionistas de confianza de David Simon en ‘The Wire’ y con el que creó posteriormente ‘Tremé’.
Overmyer aceptó encantado subirse a ese barco para escribir el piloto y ser una voz importante en la elección del protagonista que recayó en Titus Welliver, un actor relativamente poco popular pero que encajaba perfectamente en la imagen que su autor tenía de Bosch,
Amazon se interesó por el proyecto, pero le hizo pasar por el cedazo de la rueda de pilotos a votación que utilizaba en sus inicios, siendo la elección más clara para su paso a serie de esas primeras intentonas, convirtiéndose en su primer gran éxito.
Tras la emisión del piloto y todo el proceso posterior de rodaje , la 1T tardó casi un año en ver la luz, estrenando todos los capítulos de una vez en febrero de 2015 con el siguiente tráiler de presentación.
La trama: ‘Bosch’ es una versión actualizada del personaje literario con algunos cambios en su recorrido vital para adaptarlo a la época actual en lugar de los años noventa en que el personaje fue creado. Desde los estilizados títulos de crédito con la canción ‘Can’t Let Go’ del grupo ‘Caught a Ghost’ ya somos conscientes de la atmósfera diferente en que nos vamos a introducir.
La estructura de la serie suele corresponder a un caso central por temporada, con diversas ramificaciones en forma de hilos de continuidad centrados en los dos ambientes principales en los que se mueve Bosch, su familia y su comisaria.
En el terreno personal Bosch tiene una relación bastante civilizada con su ex-mujer Eleanor, una jugadora profesional de póquer tras haber sido agente del FBI durante muchos años. Ambos han tenido una hija Madison, una adolescente bastante centrada e inteligente y que es la verdadera debilidad de su padre con el que tiene también una buena relación aunque no tan cercana como quisieran ambos.
En la comisaria tenemos todo un microcosmos de personajes desde su compañero Jerry Edgar, fiel escudero de su compañero, hasta su jefa directa, la teniente Grace Billets, que además es una buena amiga suya y le cubre en determinadas ocasiones. No dudan en interaccionar fuera del terreno estricto de la comisaria para hablar en confidencialidad, como en el siguiente video que muestra sus pausas para fumar en el terrado.
En un segundo plano tenemos a toda una tropa de secundarios recurrentes en forma de detectives y agentes de policía, que proporcionan una enorme profundidad de campo a las tramas, consiguiendo algunos de los momentos más distendidos de ‘Bosch’ como es el caso de la impagable pareja que forman los veteranos detectives Crate y Barrel, dos veteranos gruñones cascarrabias que son una auténtica delicia en las dos o tres escenas que salen en cada episodio, con interacciones como la siguiente.
El esquema de un caso principal por temporada no les obliga a correr demasiado en la resolución de ese misterio, dosificando poco a poco los descubrimientos en forma de ir tirando del hilo para desenredar la madeja inicial, centrándose más en las investigaciones minuciosas que en los golpes de suerte o las ocurrencias casuales.
La sobriedad de Harry Bosch y su forma de interaccionar bordeando siempre las ordenanzas legales queda patente desde su primera aparición en el piloto en medio de ese incidente inicial que le va a marcar su vida posterior hasta que dos años después vuelve de nuevo en acción de la forma que hace en el siguiente corte.
En cada temporada Bosch se tiene que enfrentar a diversos dilemas profesionales, personales y familiares que solo van a ir agrandando sus grandes cicatrices de la vida en la mejor tradición del cine negro de toda la vida, con un porte bastante hierático y poco dado a mostrar sus emociones.
Su estilo es bastante atemporal, destacando su afición por el jazz clásico y su fabulosa casa con vistas en las alturas de Bel-Air que se pudo comprar gracias al dinero que cobró por los derechos de una película basada en su personaje, en una especie de venganza orquestada por el autor Michael Connelly por todos los intentos infructuosos iniciales que tuvo que padecer para no hacer su película inicial.
El mayor elogio que se puede hacer a ‘Bosch’ es su constancia y regularidad durante las siete temporadas que ha estado en emisión, sin ninguna problema en introducir muertes o desapariciones de personajes importantes que encajaban a la perfección en las tramas de largo recorrido que han hecho de ‘Bosch’ una rara avis de consistencia en un panorama televisivo tan cambiante.
Un aspecto que siempre me ha maravillado de Bosch ha sido la capacidad de tener un reparto con una gran profundidad, utilizando a actores curtidos, reconocibles y veteranos incluso para papeles minúsculos de una o dos escenas que me hacían estar jugando continuamente a reconocer cada nueva sorpresa que me aparecía en pantalla, recuperando sin dudar personajes de temporadas anteriores en apariciones sorpresas y siempre justificadas.
Cada temporada cerraba sus tramas principales con una gran pulcritud y elegancia, lo que le permitía reinventarse en cierta manera en cada nueva entrega, arrastrando las historias de los personajes principales como hilos de continuidad para las futuras historias.
Nada mejor para cerrar este apartado que dejarles con un video sobre las interioridades de la serie, donde explican algunos secretos del rodaje.
Los actores:
Titus Welliver es el perfecto Harry Bosch, la culminación de una carrera complicada que ha ido labrando poco a poco, desde su primer papel importante en la interesante ‘Brooklyn South’ hasta memorables personajes en ‘Deadwood’ o ‘The Good Wife’ aunque a nivel popular mucha gente solo lo reconocía por su participación mística en la parte final de ‘Perdidos’
Welliver está impresionante en un personaje complicado y con muchas aristas interiores y que en determinadas ocasiones es una bomba de relojería andante que puede estallar en cualquier momento ante las injusticias más flagrantes y en especial ante la incompetencia y corrupción de policías, jueces y fiscales.
El mayor misterio sin resolver de ‘Bosch’ es la falta de reconocimiento de Titus Welliver en todas las ceremonias de premiación, cuando su actuación es infinitamente mejor que muchas medianías que parecen abonadas año tras año a ser nominadas por trabajos prescindibles y olvidables, pero mucho más publicitados.
La evidente conexión con ‘The Wire’ de su creador Eric Overmyer tiene su primera expresión en la elección de Jamie Hector como el fiel compañero de Harry Bosch, Jerry Edgar.
Jamie Hector cumple a la perfección como el compañero a la sombra de Harry Bosch, con el que mantiene frecuentes discusiones por sus diferentes maneras de afrontar las investigaciones, subiendo de nivel a cada temporada, llegando a tener una gran importancia en las últimas temporadas por sus historias personales relacionadas con sus orígenes haitianos que comparte con el actor.
Amy Aquino es una actriz muy curtida en todo tipo de personajes recurrentes en series como ‘Urgencias’, ‘Picket Fences’ o ‘Felicity’, tras un buen debut como protagonista en una gran serie maldita ‘Brooklyn Bridge’ .
En esta ocasión está brillante como la teniente Billets, jefa directa de Bosch y que actúa de parapeto interno cuando su subordinado hace alguna de las suyas, porque en el fondo es consciente que las mejores decisiones a veces no son las más correctas. En su caso también es utilizada para introducir temas discriminatorios contra las mujeres en el cuerpo y sobre su orientación sexual.
La segunda conexión directa con ‘The Wire’ es la presencia del siempre imponente Lance Riddick que interpreta al jefe de policía Irvin Irving en esos papeles de alto mando policial que son su verdadera seña de identidad por su presencia patricia que trasmite una enorme autoridad en todo momento.
Es evidente que al verlo, nos viene a la cabeza su inolvidable teniente Daniels en ‘The Wire’ o su Phillip Broyles en ‘Fringe’, pero Reddick es capaz de muchas más cosas como demostró en la fabulosa comedia ‘Corporate’ donde era el megalómano y desatado presidente de una gran multinacional, con una increíble vis cómica.
Para finalizar las dos mujeres en la vida de Bosch, su ex-mujer Eleanor, interpretada por Sarah Clarke y su hija Maddie, a la que da vida Madison Lintz.
Sarah Clarke es otro rostro bastante conocido por su personaje de Nina Myers en ‘24’ y posteriormente en ‘Lie to me’, pero que no ha conseguido alcanzar esa brillantez como Eleanor, probablemente el personaje más desdibujado de ‘Bosch’ al entrar y salir de su vida como un Guadiana cualquiera.
El mayor merito de Madison Lintz es haber interpretado una adolescente responsable y creíble, alejada de las habituales cagadas que obligan a realizar a todos los personajes de su edad, al tener la cabeza muy centrada y saber lo que puede esperar de su padre en todo momento, con una interpretación muy sobria y contenida, con una gran química en pantalla con su padre en la ficción Titus Welliver.
Madison Lintz tuvo su primer papel de importancia como una de las niñas de la granja de las primeras temporadas de ‘The Walking Dead’ y de ahí ya pasó de forma directa a ser la hija de Harry Bosch y estará presente también en la secuelaprevista.
Final:
En el momento que ‘B0sch’ fue renovada para una séptima temporada, sus responsables ya anunciaron que iba a ser la última, por lo que tuvieron tiempo de preparar una despedida a lo grande de su personaje, empezando por el tráiler introductorio de su séptima temporada.
El último caso general fue bastante complejo con un incendio intencionado en el que murieron varias personas incluyendo una niña pequeña, lo que ha permitido a sus creadores ir llevando la historia hacia una de esas encrucijadas habituales en ‘Bosch’, donde debe decidir entre seguir las reglas o hacer lo que considera correcto, con un gran cierre que abre de forma muy elegante las puertas de la anunciada secuela.
Epílogo:
Para cerrar el artículo con una nota más distendida, tengo que destacar la gran capacidad de autoparodia que han tenido en determinados momentos, como en el siguiente video en el que todos los responsables parecen estar implicados en una delirante secuela de ‘Bosch’, llamada ‘Detective Coltrane’ donde el perro del detective es el nuevo protagonista y de la que pueden disfrutar en este brillante video.
No voy a negar mi enorme admiración por ‘Bosch’, una de las series con las más he disfrutado estos últimos años y de la que ya estoy esperando el ‘spin-off’ que han anunciado. Solo espero haber transmitido ese entusiasmo por una gran serie de la vieja escuela en el presente artículo.
Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima
Lorenzo Mejino