Maxine : la plantilla de la ficción basada en delitos reales

Martes, 29 noviembre 2022, 06:00

La industria audiovisual británica no duda en aprovechar el filón de los delitos más escabrosos que han sucedido en su historia reciente y que ocuparon durante un tiempo las portadas de sus tabloides, para generar miniseries que reproduzcan más o menos fielmente esos sucesos que recuerdan muchos de los espectadores, como en el caso de ‘Maxine’.

La plantilla habitual de este tipo de dramas suele tener tres partes, comisión del delito, detención del culpable y juicio final. Dentro de esas coordenadas, ‘Maxine’ juega con el factor diferencial de centrar la historia en la pareja del sospechoso principal, para determinar su grado de complicidad en los delitos cometidos, pero siguiendo todas las reglas habituales de este tipo de ficciones, como voy a argumentar a continuación.

Ficha: Maxine 3 ep 45 min oct 2022- Cadena: Channel 5 (UK) / Inédita (E)

La trama :

Maxine Carr es una joven asistente de profesorado en una escuela del municipio de Sobham muy cercano a Cambridge. Amante de su trabajo y de los niños, aspira a obtener una plaza fija en la escuela donde presta sus servicios. Su novio Ian Huntley es una persona bastante agresiva y extremadamente celosa que tiene una relación bastante tóxica de amor-odio con Maxine.

La desaparición de dos niñas de diez años de la escuela donde trabaja Maxine y de la que su pareja es el portero principal, enciende todas las alarmas y provoca una búsqueda a gran escala de la policía local, para encontrar el paradero de las dos niñas.

Tras revisar las cámaras de seguridad, determinan que Ian es probablemente una de las últimas personas en haberlas visto con vida y poco a poco se convierte en el principal sospechoso de los hechos, a pesar del apoyo directo que tiene de Maxine que es incapaz de creer que su novio sea capaz de cometer semejante atrocidad

‘Maxine’ está basada en un caso real sucedido en Sobham en 2004 y reproduce de forma fidedigna todos los hechos reales, pero a partir  del punto de vista de Maxine, desde el que es imposible discernir su grado de culpabilidad o inocencia como cómplice de su pareja Ian.

El creador de ‘Maxine’, el veterano jornalero Simon Tyrrell sigue al pie de la letra el manual de instrucciones de los dramas basados en hechos reales sin salirse apenas del renglón histórico, huyendo de imágenes desagradables y de morbos gratuitos, para centrarse en la minuciosa labor policial y judicial para detener a los culpables.

En esta ocasión, sus creadores han optado por actores poco conocidos como la protagonista, la debutante Jemma Carlton, que sale bastante airosa de su primer papel televisivo, al mimetizarse de forma muy efectiva en la Maxine Carr que llenó portadas de los periódicos ingleses en 2004.

No me ha convencido tanto Scott Reid ( Line of Duty) en el papel del sospechoso principal Ian Huntley, al transitar entre las aguas de ser un imbécil redomado o una mente criminal maestra.

La química en pantalla de la pareja me ha parecido manifiestamente mejorable y junto a la escasa profundidad de los personajes secundarios tanto a nivel policial como periodístico, hace que ‘Maxine’ no tenga nada destacable del aluvión de miniseries basadas en hechos reales que nos llegan cada año del Reino Unido.

Su escasa duración es una de sus principales virtudes , aunque el habitual proceso judicial del episodio final la hace incluso más farragosa de lo que se sería deseable, pero no me extrañaría que llegara más pronto que tarde por estos mundos para complacer a los amantes de este tipo de crímenes reales escabrosos como se puede ver en el tráiler que cierra el siguiente artículo.

Para cualquier comentario no dudéis en contactarme aquí o a través de mi cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima

Lorenzo Mejino