El tema del consentimiento en las relaciones sexuales ha ocupado grandes espacios de debate en los últimos años, pero en el terreno de la ficción nunca se había se tratado en el seno de un matrimonio de larga duración como ha plasmado de forma brillante ‘Querer’ una de las grandes series españolas de 2024.
Las rutinas matrimoniales pueden esconder violencias soterradas tanto de carácter sexual, como emocional y económico. El hecho de pertenecer a la intimidad de la pareja no impide que no puedan ser denunciadas como vamos a ver con todo tipo de detalles en la descomposición de un matrimonio bilbaino de treinta años que es el centro de la historia de ‘Querer’ .
Ficha: Querer 4 ep 60 m oct 2024 – Movistar + (E)
Sinopsis:
Tras treinta años de matrimonio con Iñigo, Miren decide abandonar el domicilio conyugal y denunciar a su marido por violación continuada. La situación pone en una situación extremadamente complicada a sus dos hijos Aitor y Jon, que se ven obligados a posicionarse entre sus dos progenitores en una decisión nada sencilla.
El viaje familiar de la familia Gorosmendi tras esa separación inicial les va a conducir a lugares inexplorados a cada uno de sus cuatro miembros.
El inicio: El productor donostiarra Koldo Zuazua lleva bastantes años colaborando con el productor madrileño Juan Moreno desde sus respectivas productoras independientes apostando por un cine social y de denuncia con películas recientes como ‘Maixabel’ y ‘Soy Nevenka’ .
Ambos empezaron a pensar en desarrollar alguna historia basada en el consentimiento y la evolución legal que ha tenido recientemente.
A tal efecto contactaron con la directora de Barakaldo Alauda Ruiz de Azúa, que tras realizar mucho cine publicitario y diversos cortos, deslumbró a todo el mundo con su debut cinematográfico en 2022 con la exquisita ‘Cinco Lobitos’ que gano bastantes Goyas ese mismo año.
Ruiz de Azúa nunca había trabajado en televisión pero el concepto inicial le pareció interesante para llevarlo a un terreno mucho menos trillado, como sería el consentimiento en un matrimonio asentado de larga duración y con hijos mayores por en medio, contando con el interés inicial de Movistar para iniciar un desarrollo de la idea.
Con esa luz verde inicial, Ruiz de Azúa entró en una fase de exhaustiva documentación sobre el tema de las violencias domésticas conyugales hablando con numerosas abogadas, psicólogas e incluso victimas, para acabar asistiendo a diversos juicios para conocer la realidad judicial sobre el tema.
En esa fase empezó a contar con la colaboración de otros dos guionistas, los catalanes Eduard Sola ( izq, Casa en Flames, Mamen Mayo) y Julia de Paz ( centro, Ama) , tanto para la fase de documentación como para la escritura final de los guiones.
El rodaje se hizo en Bilbao, al ser un lugar que conoce perfectamente la directora Alauda Ruiz de Azúa, para encontrar las mejores localizaciones para ese tono grisáceo y mustio como seña principal de identidad de ‘Querer’.
Su estreno oficial fue en el pasado Zinemaldea, donde triunfó por todo lo alto, despertando una gran expectación para su estreno el mes de octubre en la plataforma Movistar que la promociónó con el siguiente video.
La trama: ‘Querer’ es la crónica de la descomposición de un núcleo familiar de larga duración narrada en cuatro actos que representan los cuatro momentos claves de ese doloroso proceso que afecta de maneras muy diferentes a los cuatro miembros de la familia Gorosmendi, el padre, la madre y los dos hijos.
Esas trayectorias personales se van entrelazando con el hilo principal de ‘Querer’ que es la denuncia por violación continuada durante el matrimonio de Miren contra su esposo Iñigo.
El primer episodio describe con todo lujo de detalles el momento en que Miren tras muchos años de sufrimiento, acaba explotando y decide separarse de su marido, convenientemente asesorada por una abogada que le explica en las primeras escenas sus opciones.
Miren no tiene una explosión repentina sino que se ha ido cociendo a fuego lento durante décadas en parte por el miedo a lo desconocido fuera del matrimonio, al ser totalmente dependiente de su marido en todos los aspectos de su vida y en parte por la vergüenza y el miedo a no ser creída por no haber denunciado la situación con anterioridad.
El segundo episodio se dedica a las consecuencias iniciales de la separación, similares a una bomba que ha explotado de forma repentina y que obliga a todos a reaccionar frente a la situación eligiendo bando.
El tercer episodio se dedica de forma exclusiva al juicio que enfrenta a los cónyuges, rodado con una veracidad y respeto a nuestro sistema judicial, muy poco habituales en nuestras pantallas.
Por último en el episodio final, vemos los finales de las trayectorias de los cuatro miembros del clan Gorosmendi, en todos los casos muy alejadas del punto inicial en que los conocimos.
‘Querer’ opta en todo momento por mostrarnos los puntos de vista personales de todos los implicados para que podamos conocer todas sus virtudes y defectos, huyendo de los extremos calificativos para quedarse en una tonalidad de grises más o menos oscura para todos ellos.
Los relatos de Miren y Iñigo son sus visiones personales de la historia y muy diferentes en tono y percepción, por lo que detalles que al marido le pueden parecer de lo más normales eran verdaderas agresiones angustiosas para Miren, como por ejemplo su absoluta dependencia económica del dinero que le pasaba su marido.
Ese relato de las microagresiones que sufría en su vida diaria hace que poco a poco nos vayamos poniendo del lado de Miren, aunque haciéndonos recapacitar sobre los tóxicos resultados de una posición exclusivamente dominante del marido sobre la mujer en el aspecto económico.
‘Querer’ está dirigida con una gran sutilidad y brillantez por Alauda Ruíz de Azua, logrando un gran tono grisáceo, rutinario y adusto que predomina en la relación familiar, muy en la estela de las series nórdicas donde el sol es un elemento casi inexistente, además de hacer un retrato impecable de la burguesía bilbaína y de la lucha de clases que siempre ha flotado a orillas del Nervión.
La evolución de cada uno de los cuatro personajes fluye de una manera muy armónica, jugando incluso con largas elipsis temporales para evitar fases de relleno entre los cuatro momentos importantes de ‘Querer’ que marcan cada capítulo.
Este tipo de serie intimista depende absolutamente del acierto en el reparto y en ‘Querer’ han acertado de pleno en los cuatro interpretes, especialmente con unos fabulosos Nagore Aranburu y Pedro Casablanc, además de la enorme sorpresa de ver la mejor interpretación de su carrera de alguien tan improbable como Miguel Bernardeau.
‘Querer’ es una serie que nos hace recapacitar y replantearnos nuestras propias situaciones y reacciones personales como si fuera un espejo en el que poder mirarnos, algo muy difícil de conseguir en una ficción y que ‘Querer’ consigue con matrícula de honor.
Para finalizar este apartado le voy a mostrar el tráiler oficial de su estreno en Movistar Plus, donde ya ha finalizado su emisión.
Los actores: La azpeitarra Nagore Aranburu lleva siendo muchos años una de las actrices vascas más reconocidas en Euskadi por sus abundantes apariciones en todo tipo de programas de ETB. Personalmente la descubrí al ser la excelente protagonista en la mejor serie en euskera de los últimos años ‘Hondar Ahoak’, donde interpretaba a una huraña y hierática detective en un tono bastante similar al de ‘Querer’.
Su capacidad de mostrar y describir de forma contenida el increíble sufrimiento interior que ha padecido durante tantos años deja helado el corazón, al hacernos entender a la perfección el infierno que ha sufrido por estar junto a su marido, con una interpretación que va a arrasar en los premios del ramo.
Ese personaje y esa interpretación de Nagore Aramburu, necesitaba un oponente a su altura y Pedro Casablanc vuelve a demostrar porque es uno de los mejores actores de su generación a pesar de no tener la popularidad de otros mucho más mediocres.
Casablanc borda el personaje del burgués bilbaíno que siempre ha hecho las cosas a su manera sin la menor preocupación por la felicidad de su mujer, tratándola siempre como un mueble más del domicilio conyugal, con la principal misión de hacerle la comida y colmar sus necesidades sexuales, convencido que con la seguridad económica que le da ya tiene suficiente para estar feliz.
La gran sorpresa y revelación de ‘Querer’ ha sido ser testigo de la mejor interpretación de la carrera de Miguel Bernardeau, como el hijo mayor Aitor, casado y con un hijo y que tiene un arco personal de evolución muy interesante e inesperado, en especial cuando empieza a verse reflejado en su padre, algo que no le gusta nada.
Siempre había tenido catalogado a Bernardeau como un actor mediocre por sus personajes en series instagrameras o tiktokeras como ‘Elite’ o ‘La Última’, agravado este año por su protagonista en la nefasta nueva versión española de ‘Zorro’, pero es de justicia reconocer que me ha hecho cambiar absolutamente mi percepción sobre él.
Por último tenemos al murciano Iván Pellicer, que interpreta al hijo pequeño Jon, el más enmadrado de los dos y con sus propios demonios personales que iremos descubriendo, a pesar de ser el personaje más desdibujado y esquemático de todo el elenco.
Tras haber aparecido en papeles recurrentes en series olvidables como ‘Paraíso’ o ‘Sagrada Familia’, no tenía ninguna impresión previa de Iván Pellicer y lo cierto es que me ha gustado su interpretación de un hijo que se ve demasiado desbordado por las reacciones de sus padres.
Final : ‘Querer’ es una de las mejores series del año 2024, por esa habilidad de describir y narrar un tema tan delicado como las violaciones en el seno del matrimonio, pero mostrando los hechos de una manera honesta y sin querer sentar cátedra, dejando que la inteligencia del espectador saque sus propias consecuencias.
Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima
Lorenzo Mejino