Así es. De momento esto va muy bien. El programa promete, he conseguido encajar gran parte de las películas que quería ver y para empezar dos excelentes películas. De hecho, no recuerdo un mejor inicio en los últimos años.
En la Sección Oficial hemos comenzado con “Promesas del Este”, la nueva de Cronenberg premiada en Toronto’07. Y si dependiera de mí, o tenemos una Sección Oficial histórica por su calidad cinematográfica (que me temo que no) o de aquí tampoco se iría de vacío. Sin ir más lejos, ninguna de las pelis de la Sección Oficial de la edición del año pasado me gustó tanto. Cronenberg se nos ha pasado a argumentos y temas más “convencionales” que los de hace unos cuantos años, pero su maestría narrativa sigue en plena forma. Si a esto unimos unos intérpretes excelentes, un guión inteligente (emborronado sólo por un exceso “de casualidad” hacia el final de la película) y una producción sólida es lógico que el resultado sea cine de calidad. Hay momentos en los que incluso osa jugar en el terreno de “El Padrino” o de algunas de las pelis de gángsters de Scorsese y no sale mal parada. Seguramente uno podía esperar otro final menos convencional de alguien como Cronenberg, pero es lo que tiene el cine de género: hay unas normas a cumplir. Nota para fans de Viggo: hay una larga escena de una pelea del personaje al que interpreta el señor Mortensen en el que muestra los tatuajes de absolutamente “todo” su cuerpo.
Algunos salían de “Promesas del Este” quejándose de que es una peli muy dura. Pues desde aquí les invito a que no se acerquen a ver “4 meses, 3 semanas y 2 días”. Ya os comenté en el artículo anterior que me parece una película excepcional, pero lo que se cuenta aquí sí que es realmente duro. No hay violencia explícita como en la de Cronenberg, pero la imagen que da de la Rumanía de los últimos años de Ceaucescu es realmente desoladora. Si además la película se centra en una sórdida historia de aborto ilegal, es normal que uno acabe “machacado” por lo que ha visto, pero satisfecho por haber “disfrutado” de una de las mejores películas del año. Y qué gran actriz es su protagonista, Anamaria Marinca.
Ahora una de txaskarrillos… ¿no son ganas de llamar la atención pasearse “toda div(in)a” por los alrededores del Kursaal y la zona de acreditados del Festival a la salida de la peli de inauguración, incluida visita a la atestada rueda de prensa de la peli, portando un innecesario gorro negro y encaramada a unos imposibles taconazos? Pues así se paseaba “la Caye” (Guillén Cuervo) este mediodía por la Zurriola.
Ahora “Mataharis”… seguiremos informando.