Una semana llevan unos cuantos señores y señoras contando papeletas. En total son más de 1.700 horas de trabajo para computar los votos de los más de 6.000 miembros de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas. Porque el sistema de recuento es extraño. En cada una de las boletas cada académico habrá marcado en orden de preferencia sus, según el caso, 5 ó 3  favoritas de la categoría en la que le corresponde votar (los directores a los directores, intérpretes a intérpretes, guionistas a guionistas… salvo en la de mejor película en la que vota todo el mundo). Los señores de PricewaterhouseCoopers computan esos votos de forma que se dé prioridad al orden de la preferencia de los académicos y que ninguna boleta de voto, a pesar de registrar hasta 5 favoritos, se cuente dos veces. Un curioso sistema de recuento que también se utiliza en las elecciones al Senado de Australia, al Parlamento irlandés o al Ayuntamiento de Cambridge, Massachusetts, donde deben de saber mucho ya que es donde están la Universidad de Harvard y el MIT (Es que en internet uno se puede enterar de casi todo) Un sistema que premia el apoyo minoritario y militante frente a un está bien masivo. Es decir, un candidato que reciba el 20% de los votos totales en la primera o segunda posición de preferencia, saldría elegido antes que otro que tenga el 50% de los votos totales a partir de la tercera posición. 

Y tras todo ese trabajo, en unas horas se anunciarán las nominaciones a los Oscar. Y éstas son las favoritas en las principales categorías, aunque en muchos casos no coincidan con las mías. Éstas son las que más suenan, las que todo el mundo espera que estén. Así que juguemos a equivocarnos.

PELICULA

Las fijas: ‘Slumdog Millionaire’ y ‘El curioso caso de Benjamin Button’.

Las otras favoritas: ‘Mi nombre es Harvey Milk’, ‘El desafío: Frost contra Nixon’, ‘El caballero oscuro’.

Pero cualquiera de estas tres podría quedar fuera si a los académicos les parece que a ‘Wall-E’ la categoría de mejor película de animación se le queda pequeña. O si  se dan cuenta de que ‘The Wrestler’ y ‘Revolutionary Road’ son dos grandes filmes. O si los actores deciden que hay que apoyar a películas como ‘La duda’ que les permiten lucirse.

DIRECTOR

Aquí también parecen fijos Danny Boyle por ‘Slumdog Millionaire’ y David Fincher por ‘El curioso caso de Benjamin Button’. Pero para las otras tres plazas quién sabe: podrían estar los directores de las favoritas de la categoría anterior (Gus Van Sant por ‘Mi nombre es Harvey Milk’, Ron Howard por ‘El desafío: Frost contra Nixon’ y Christopher Nolan por ‘El caballero oscuro’), pero parece que la nominación de Ron Howard puede peligrar ante Darren Aranofsky por ‘The Wrestler’, Mike Leigh, un director al que adoran muchos académicos, por ‘Happy’ e incluso Jonathan Demme por ‘La boda de Rachel’. Y no olvidemos que las películas de animación tampoco se dirigen solas, por lo que Andrew Stanton podría tener su oportunidad por ‘Wall-E’.

ACTOR

En esta categoría hay dos candidatos entre los que parece que debe estar el Oscar. O Sean Penn por ‘Mi nombre es Harvey Milk’, o Mickey Rourke (sí Mickey Rourke) por ‘The Wrestler’. El duelo está servido. El resto parece que se deberán conformar con la nominación. Y los que más suenan para las tres plazas restantes son tres veteranos ilustres como Frank Langella por ‘El desafío: Frost contra Nixon’, Richard Jenkins por “The Visitor” y Clint Eastwood por ‘Gran Torino’ y dos guapos oficiales Brad Pitt por ‘El curioso caso de Benjamin Button’ y Leonardo DiCaprio por ‘Revolutionary Road’. 

ACTRIZ

También hay dos que parecen fijas: Meryl Streep por ‘La duda’ y Kate Winslet por ‘Revolutionary Road’. Ambas están espléndidas en sus películas y su historial de nominaciones demuestra que las adoran. Además hay otras dos interpretaciones femeninas, la de Sally Hawkins en ‘Happy’ y la de Anne Hathaway en ‘La boda de Rachel’ que no parece que la Academia vaya olvidar. Para la quinta plaza, podría estar la ganadora del Zinemaldi Melissa Leo por ‘Frozen River’, con el permiso de Angelina Jolie por ‘El intercambio’, Michelle Williams por ‘Wendy & Lucy’ y Kristin Scott-Thomas por ‘Hace mucho que te quiero’.

ACTOR SECUNDARIO

Sin lugar a dudas, el gran favorito es Heath Ledger por su Joker en ‘El caballero oscuro’. Lo que no consiguió Jack Nicholson podría conseguirlo Ledger. Otro fijo para la nominación debería ser Phillip Seymour Hoffman por ‘La duda’, a pesar del fraude de categoría, ya que aunque su personaje es protagonista la productora ha optado por promocionarlo como secundario. De todas formas, está magnífico en ‘La duda’. Otro que parece fijo en esta categoría es el amigo Robert Downey Jr. por ‘Tropic Thunder’. Y para las dos plazas que quedan habría que tener en cuenta a Josh Brolin por ‘Mi nombre es Harvey Milk’, a Dev Patel si ‘Slumdog Millionaire’ arrasa, Eddie Marsan por su amargado profesor de autoescuela en ‘Happy’ y el robaescenas Michael Shannon por ‘Revolutionary Road’.

ACTRIZ SECUNDARIA

A estas alturas parece claro que este año Kate Winslet se tiene que llevar un Oscar. Y si no es por ‘Revolutionary Road’ como protagonista, deberá ser como secundaria por ‘El lector’, aunque sea otro descarado caso de fraude de categoría, para evitar el que se haga la competencia a ella misma. Si la Winslet deja el terreno libre en esta categoría, la favorita es Penélope Cruz por ‘Vicky Cristina Barcelona’. Los que hemos visto la película en versión original sabemos por qué. Los que la vieron doblada se preguntan a qué viene tanto revuelo. Otra casi segura nominada parece ser Viola Davis que en ‘La duda’ le roba su escena a la mísmisima Meryl Streep como si nada. Su compañera de reparto Amy Adams, aunque su personaje sea más largo, tiene menos posibilidades. La pugna por las dos plazas que quedan parece que estará entre la espléndida Marisa Tomei por ‘The Wrestler’, Taraji P. Henson la madre de Brad Pitt en ‘El curioso caso de Benjamin Button’ y Rosemarie Dewitt magnífica Rachel en ‘La boda de Rachel’.

La respuesta en unas horas. ¿Me equivocaré demasiado?