A causa de los últimos acontecimientos acerca de la violencia de género, hemos visto importante hablar sobre ello y concienciarnos un poco más, si cabe, en denunciar estos casos, que pueden acabar en tragedia. Os invitamos a leer atentamente y prestar atención, ya que este tema es de suma importancia. BASTA YA CON LA VIOLENCIA.
La violencia es una conducta aprendida. Es anterior a la pareja y no cambia espontáneamente ni por la voluntad propia ni por la de otras personas. Para poder cambiar es necesaria la ayuda de profesionales adecuad@s. Los celos no son una demostración de amor sino un abuso de poder.
La necesidad de la posesión y de control de la pareja, las prohibiciones y amenazas, encubren una autoestima muy baja, inseguridad y desconfianza y tienen más que ver con la historia de una persona que con lo que haga o no haga su pareja.
Por eso aunque tu pareja o tu novio consiga dominarte o encerrarte, no va a dejar de manifestar sus celos, distorsionando situaciones o haciéndote acusaciones que imagina.
De todas las mujeres asesinadas por sus parejas, el 25% (una de cada cuatro) eran parejas o novias de entre 14 y 25 años, que creyeron en el amor romántico, olvidándose de sí mismas y su seguridad.
La Organización de la Naciones unidad (ONU), definió el 1995 la violencia contra las mujeres como: “Todo actos de violencia sexista que tiene como resultado posible o real un daño físico, sexual o psíquico, incluidas las amenazas, la coerción o la privación arbitraria de libertad, ya sea que ocurra en la vida pública o en la privada”
La violencia de género presenta los siguientes rasgos:
1.- Existen factores socio-culturales que aplican, mantienen y justifican la desigualdad entre el hombre y la mujer: masculinización de los espacios públicos, utilización de un lenguaje sexista, falta de concienciación de los problemas que suscita en la mujer la imposición de roles por la sociedad y de la forzada distribución de su tiempo, falta de sensibilización, que no puede combatirse eficientemente sin el interés, la implicación y el compromiso de la propia sociedad.
2.- Esta violencia se puede dar en todos los grupos sociales y niveles socioeconómicos y culturales.
3.- El agresor ejerce la violencia para someter a la mujer y mantener así la relación dominio y control.
4.- Los actos violentos se repiten y aumentan mientras dure la relación, esto se denomina “el ciclo de la violencia” que consta de 3 fases:
– Acumulación de tensión: Acumulación de conflictos en la pareja.
– Explosión de la Violencia: Descarga de la tensión acumulada anteriormente. Puede adoptar distintas formas y grados de intensidad.
– “Luna de miel”: Es la fase la manipulación afectiva. Disminuye la tensión. Durante esta etapa el agresor puede pedir perdón y prometer que cambiará y no volverá a llegar a cabo agresiones violentas. Pasada esta etapa se volverá a la etapa inicial de acumulación de tensión.
5.- En los malos tratos no existe amor, sino posesión, control y dominio.
6.- La mujer víctima de la violencia de género siente miedo, vergüenza y experimenta un sentimiento de culpa por creer que ha sido ella la causante de la acción violenta del agresor.
7.- La violencia se manifiesta de diversas maneras, la física es la más visible pero también existen: el abuso verbal, emocional, económico, psicológico, ambiental y la violencia sexual.
8.- La violencia de género no es un asunto privado, es un delito.
9.- Cuando una mujer solicita ayuda, generalmente la situación ya es muy seria y peligrosa.
10.- En la mayoría de las ocasiones, las agresiones son premeditadas, aprovechando las situaciones de mayor aislamiento o incomunicación de la víctima.
11.- El alcohol y las drogas en ningún caso justifican actitudes violentas.
12.- El agresor no es un enfermo mental, es plenamente responsable de sus actos.
A continuación os presentamos algunos de los INDICADORES DE VIOLENCIA DE GÉNERO, nos gustaría que leyerais con atención y observaseis si alguna mujer de vuestro alrededor o el chico con el que mantienes esa relación de pareja tienen alguna de estas características:
– Controla lo que haces, exige explicaciones por todo y pretende conocer hasta tus pensamientos. No quiere que tengas “secretos” para él.
– Quiere saber con todo lujo de detalles a dónde vas, dónde estuviste y con quién. Cuánto tiempo pasas en cada sitio. Te llama continuamente para comprobarlo o se “pasa” por tu casa.
– Te vigila de manera permanente, te critica o intenta que cambies la manera de vestir, de peinarte o de maquillarte. O simplemente intenta que cambies de forma de hablar o de comportarte.
– Te amenaza o realiza prohibiciones con respecto a tus estudios, tu trabajo, tus costumbres o las actividades o las relaciones que tienes.
– Quiere conocer a todos tus parientes, amigos, vecinos, compañeros de estudios o trabajo para saber cómo son. Después se pasa la vida controlándolos, criticándolos, sospechando o desconfiando de ellos.
– Monta escándalos en público o en privado por lo que tú u otras personas dijeron o hicieron.
– Te suele dejar “plantada” en salidas o en reuniones, sin dar explicaciones ni aclarar los motivos de su comportamiento.
– No expresa ni habla acerca de lo que piensa o desea. Sin embargo, él pretende que adivines lo que le ocurre o lo que desea y que estés pendiente de él.
– A veces te da órdenes. Otras te “mata” con su silencio, con actitudes esquivas, desagradables y con mutismo. No abandona esta actitud aunque consiga lo que busca.
– Demuestra enfado y frustración por todo lo no sale como él quiere, sin distinguir lo importante de lo superfluo.
– Te culpa a ti de todo lo que ocurre y te convence de que es así, dando vueltas a las cosas hasta que consigue confundirte o dejarte cansada e impotente.
– No reconoce ninguna responsabilidad sobre la relación que mantenéis ni sobre lo que sucede a l@s dos.
– No te pide disculpas por nada.
– Te mantiene en vilo en fiestas o reuniones, coqueteando con otras chicas de manera abierta o encubierta.
– Es seductor y simpático con todo el mundo, pero a ti te trata con crueldad.
– Te está prometiendo siempre que va a cambiar sus defectos o sus adicciones. Nunca cumple, pero sigue insistiendo en que lo hará.
– Piensa que las mujeres son inferiores y deben obedecer a los hombres. Y si no lo dice, actúa como si lo pensará.
– Para conseguir mantener relaciones sexuales, si tú no estás dispuesta, pone en práctica toda una serie de artimañas: te acusa de anticuada, pone en duda tus sentimientos o tu amor hacia él, te acusa de frígida, te avergüenza haciéndote sentir un bicho raro, te reprocha que no te importa que él “se ponga caliente y no puede desahogarse”, te amenaza con buscarse a otras chicas para acostarse con ellas, te dice que “tienes miedo a convertirte en mujer”, te critica por estar muy atada a tus padres, a tus convicciones morales o a tu religión, exagera tus defectos,…
– Se burla, habla de forma grosera o con desprecio de las mujeres en general. Intenta que tú no te parezcas a ellas y que seas sólo como a él le gusta.
– Es bueno y cumplidor en el trabajo, pero contigo siempre llega tarde y no cumple los compromisos. Se muestra irresponsable por los olvidos y descuidos.
– Todo lo transforma en bromas o utiliza el humor para tapar sus actos de irresponsabilidad, restando importancia a su incumplimiento.
– Utiliza algún dato de ti o cosas que conoce de tus otras relaciones para hacerte reproches o acusaciones o para demostrar su desconfianza en ti y en tu amor por él.
– Exagera tus defectos haciéndote sentir culpable y descalificada.
– Para demostrar sus enfados deja de hablarte o desaparece varios días, sin dar explicaciones.
– Se muestra tolerante y bondadoso, como si fuera un ser superior tratando con una “niñita”.
– No te presta atención y asegura con superioridad saber y tener más experiencia que tú.
Este post va dirigido a mujeres, ya que siempre ha existido una jerarquía de poder entre el hombre y la mujer en donde esta quedaba por debajo. Además, como podemos ver a menudo en los medios de comunicación la mayoría de los casos de violencia son dirigidos hacia las mujeres.
Esto no quiere decir que no existan hombres que sufran la violencia de género, por lo tanto también los apoyamos a que lo denuncien.
Muchos abrazos
Rakel y Paky
P.D. Si sufres Violencia por tu pareja, familiar o cualquier persona llama al Teléfono para denunciar casos de violencia de género 016.
P.D. Para leer recomendamos “Mi marido me pega lo normal” de Miguel Lorente Acosta
P.D. Para ver “El juego del Ahorcado”.
Bibliografía
– Manual contra la violencia de género. Junta de Andalucía.
– Prevención de la violencia de género en las relaciones de pareja. Junta de Andalucía.