Lo vivido este pasado fin de semana en Le Mans ha sido duro. Perder el título por los continuos golpes de un rival hacia mí es algo muy difícil de digerir. Además, por un solo punto… Un punto que lo cambia todo.

Después de dominar todas las sesiones de entrenamientos libres y la calificación estaba peleando por la victoria con Gabillon en la primera carrera hasta que salió el safety car. Ahí se confirmaron mis temores, cuatro curvas antes de que se diera la resalida, Borja García quién ya me había golpeado con consecuencias para mí este año en dos ocasiones comenzó a pegarme por detrás repetidas veces con el safety car en pista… increíble. Una vez se dio la resalida me golpeó en la primera chicane y cuatro curvas más adelante me golpeó con violencia y me sacó de pista haciéndome perder muchos puestos. Le sancionaron, pero el daño quedó hecho. Kumpen terminó por delante de mí gracias a que Borja García me sacó de pista y por la sanción que le pusieron a Cheever se llevó la victoria que había sido del italiano. Yo con suerte pude terminar 3º y con la vuelta rápida que me daba la pole para el día siguiente.

El domingo afortunadamente no me crucé con García, pero no fuimos como esperábamos, fallamos con los reglajes en pista mojada y Kumpen terminó un punto por delante de nosotros en el campeonato. Un campeonato perdido en los golpes recibidos en Nurburgring y Valencia donde no terminamos las carreras y el sábado en Le Mans dónde Kumpen nos pasó gracias a que García nos sacó de pista. En las 10 carreras que sí logramos acabar, terminamos todas  en el pódium menos en una que terminamos cuartos. Es duro digerir que con un 4º puesto como peor resultado en las carreras terminadas y todo lo demás pódiums pierdas un campeonato, pero los dos abandonos por golpes han podido con los buenos resultados. Nadie ha ganado más carreras que nosotros y nadie ha logrado más pódiums que nosotros. Hemos sufrido la animadversión de un piloto hacia nosotros, aunque no sabemos el motivo.

Me dio especial pena no poder ofrecer un fin de semana con final dulce a mis amigos Jaime Caballero y Juanjo Aguilera, que vinieron a verme hasta Le Mans. Con Jaime he pasado muchas horas de entrenamiento en mar y piscina esta temporada y he podido ver lo duro que es una travesía de larguísima distancia acompañándole en su reto de Javea a Ibiza y me alegro de que él haya podido vivir en primera persona en Le Mans lo que es la NASCAR Europea.

Aunque dicen que el tiempo cura las heridas, a más días pasan, menos lo aceptamos todos los miembros del equipo por lo injusto de verte perseguido por alguien, en este caso Borja García, como comprobamos el sábado en Le Mans. Correr con alguien que cada vez que está a tu lado te sacude es algo contra lo que no se puede hacer nada. Espero que la organización endurezca las sanciones la temporada que viene, por el bien de los competidores.

Por lo demás, felicitamos a Kumpen y a su equipo. Él es un piloto limpio que no tiene la culpa de lo que ha hecho García y sólo ha aprovechado la oportunidad y es un buen campeón para el campeonato ya que va a dar una buena imagen en la gala de EEUU de nuestro campeonato.

Ahora es tiempo de sentarnos con el equipo y los patrocinadores y valorar qué campeonato correr en 2015.